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Conoce qué es la mariposa de admisión de un coche y cuál es su función, en este artículo.

Existen elementos reguladores en la configuración del motor, como la mariposa de admisión, que se encarga de hacer notar el buen o mal funcionamiento de este. Esta pieza, en particular, desempeña una función elemental.

A través de ella, el coche puede ser diagnosticado en cuanto a la manera que se manifiestan algunos síntomas relacionados con la combustión y el combustible. Vamos a identificar qué representa esta válvula para el motor y la utilidad que aporta al desempeño del coche.

¿Qué es la mariposa de admisión y cómo funciona?

Es una válvula cuya utilidad consiste en administrar la cantidad de aire que debe entrar a la cámara de combustión, para que el cambio químico se efectúe de forma equilibrada.

Es un componente elemental del sistema de admisión del coche, imposible de obviar cuando se está diagnosticando el coche por causa de anomalías relacionadas con la potencia y ralentí del motor.

Tipos de mariposas de admisión

Podemos resaltar dos clases de mariposas, las que funciona bajo principio mecánico y las que funcionan como componente electrónico:

Mariposa de admisión mecánica

Este tipo de mariposa de admisión está ya prácticamente en desuso. Se encontraban sujetas al pedal del acelerador mediante un cable mecánico que transmitía la acción del conductor directamente a la mariposa, regulando así la cantidad de aire que ingresaba al motor en función de la posición del pedal.

Sin embargo, con los avances en la tecnología de gestión del motor, como los sistemas de inyección electrónica, las mariposas de admisión mecánicas han sido reemplazadas en gran medida por sistemas más precisos y eficientes.

Mariposa de admisión electrónica

La mariposa de admisión electrónica es una modernización de la mariposa de admisión mecánica, donde el control manual del pedal del acelerador es reemplazado por un sistema electrónico. En este caso, la mariposa de admisión electrónica ya no está sujeta al pedal del acelerador mediante un cable mecánico, sino que su apertura y cierre son gestionados por un actuador electrónico, controlado por la unidad de control del motor (ECU).

Este tipo de sistema electrónico utiliza sensores para monitorear diferentes parámetros del motor, como la posición del pedal del acelerador, la velocidad del motor, la carga del motor y otros factores relevantes.

Además de su eficiencia y configuración, este tipo de mariposas presentan las siguientes ventajas:

Mayor precisión en posición y funcionamiento.
Rendimiento y potencia del motor mejorados.
Mayor durabilidad.
Menos problemas, facilitando el mantenimiento.

Entre sus inconvenientes encontramos:

Coste más elevado que las mecánicas.
Requieren un sistema de control electrónico, aumentando la complejidad.
Menor capacidad de ajuste manual para modificaciones específicas.

Otros tipos de mariposas de admisión

En vehículos con carburador se pueden encontrar mariposas adicionales que bloquean el aire en la entrada del carburador, pueden ser manuales, accionadas por tiradores de cable, o automáticas, utilizando sensores bimetálicos de temperatura.

Regulación de la mariposa de admisión: Pasos y precauciones

Aunque siempre aconsejamos la intervención de un profesional, sin embargo, puedes seguir los siguientes pasos para una correcta regulación de la mariposa de admisión:

Desconectar la batería para evitar daños electrónicos durante la regulación.
Ubicar la mariposa de admisión, generalmente en el sistema de aceleración, es identificable por una compuerta circular.
Desmontar el sistema de aceleración, para ello se puede requerir la extracción de otros componentes del motor.
Determinar si la posición actual de la pieza, es la recomendada por el fabricante.
Ajustar la válvula con precisión para evitar afectar el rendimiento del motor.
Reinstalación del sistema de aceleración.
Restablecer la alimentación eléctrica del vehículo.

Como ves, es un proceso complicado, con lo que lo mejor es llevar el coche a un taller y dejar que un profesional se encargue de esta tarea.

Coste y mantenimiento de las mariposas de admisión

Constan de una carcasa de aluminio y una tapa inferior de chapa de metal, pero su precio es considerable, cercano a 150 euros, sumando 80 euros más por el servomotor y el potenciómetro.

Señales de desperfectos en la mariposa de admisión

Detectar signos de avería en la mariposa de admisión es vital. Algunos síntomas incluyen:

Pérdida de potencia.
Aumento del consumo de combustible.
Inestabilidad al ralentí.
Testigo en el cuadro de mandos.
Ruidos inusuales en el motor.

La graduación de la mariposa, es realmente decisiva para el rendimiento del motor, porque determina la cantidad de aire que ingresa en él, afectando la relación aire-combustible. Ajustar la posición de la mariposa, puede aumentar el rendimiento.

Recuerda, debes tener alta precaución al intentar hacer cualquier modificación porque puede afectar la seguridad y fiabilidad del vehículo.

Escrito por Juan L. García

Fuente: https://www.autopista.es/

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