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Si no sabes si debes cambiar la correa de distribución del coche, aquí sabrás cada cuanto tiempo debes hacerlo.

El sistema de distribución de los coches es una parte fundamental del motor de combustión interna y para cuidarlo es necesario cambiar la correa de distribución cada cierto tiempo o bien, cada cierto kilometraje.

Aunque son tantos los elementos que integran un vehículo, es increíble cómo esta correa es tan importante, al punto que al romperse, los daños que sufre el coche son devastadores. Para no distraerte más, te invitamos a estudiar un poco acerca del tema.

Correa de distribución: Definición

Es la pieza a cargo de sincronizar el movimiento rotatorio del cigüeñal y del árbol de levas en un motor que trabaja con combustión interna. En específico, sirve para cerrar y abrir las válvulas de forma acompasada mientras se cumple el proceso de admisión y escape en los cilindros.

Su importancia radica en que el motor podrá continuar cumpliendo su ciclo, evitando daños significativos que se pueden traducir en caras reparaciones.

Consecuencias de la rotura de la correa de distribución

La rotura de la correa de distribución puede ser catastrófica y bastante cara:

Se pierde la sincronización del motor en sus movimientos.
Los pistones podrían doblar las válvulas con los golpes repetidos y sin control que comenzaría a dar
La culata sería otra de las piezas que sufriría daños por causa de la falta de sincronía de los movimientos del motor.

Síntomas de una correa de distribución en mal estado

Para evitar los graves problemas que ocasiona la rotura de la correa de distribución, aquí tienes varias situaciones que puedes identificar como alarma o síntomas de que se encuentra deteriorada:

La correa tiene claros signos de desgaste

Cada vez que levantes el capó del coche, revisa la correa de distribución y verifica su estado. Acude de inmediato al mecánico de tu confianza si detectas alguna irregularidad o señal de deterioro, grietas o mellas en su dentado.

Ruidos extraños o poco comunes

Es imposible que no conozcas tu vehículo y cómo se comporta. Siempre que comienza a dar movimientos o ruidos extraños y diferentes a los que normalmente se escuchan, ya sabemos que puede tratarse de una avería. Si se debe a una tensión inadecuada o desgaste en algún lugar de la correa, debes llevarlo a un taller cuanto antes.

Vibraciones poco habituales

En estos casos, si se detecta la correa en mal estado, es importante proceder a la sustitución inmediata, ya que esta circunstancia afecta los pistones y las válvulas.

Arranque defectuoso

Cuando notas que al coche le cuesta arrancar, es posible que la correa esté muy cerca de romperse y si ya está rota, simplemente, el coche no arrancará.

Humo en el tubo de escape

Si la salida de humo es escandalosa, evidentemente, algo no está bien y puede ser cosa del estado de la correa de distribución, que puede causar fallos en la ignición. No olvides que esta correa es la que se encarga de que los tiempos de la combustión se cumplan de forma sincronizada.

¿Cada cuánto se debe sustituir la correa de distribución?

Aunque las empresas fabricantes advierten en sus manuales cuál es la cifra en kilómetros aproximada para realizar el cambio de la correa de distribución, es de vital importancia estar atento a señales de desgaste y considerar factores individuales, para evitar averías caras.

Por ejemplo, si conduces mayormente en ciudad, donde la correa está en constante movimiento, incluso en parado, la durabilidad puede disminuir un 20% o 25%.

No dejes que una pieza tan importante te cause grandes problemas. Consulta las indicaciones de tu fabricante y considera cambiar la correa un poco antes de lo recomendado para garantizar la salud a largo plazo de tu vehículo.

Escrito por Juan L. García

Fuente: https://www.autopista.es/

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