Cuando se produce una gran tormenta, hay varias averías típicas y todas muy caras de reparar. Una es evitable… y nos permitirá salvar al motor.
Ponte en situación. Comienza a diluviar y, de repente, hay tanta agua que la carretera desaparece bajo un gran charco. No hay riesgo de que nos lleve una riada, pero sí es probable que, pese a esos charcos, tratemos de continuar nuestra marcha.
Pues bien, que haya un gran charco y no exista riesgo de que nos arrastre en plena riada no significa que podamos superar cualquier charco con nuestro coche como si nada, y menos aún que lo podamos atravesar de cualquier manera.
La explicación es bien sencilla: para funcionar, un motor necesita que le entre aire al interior de los cilindros. Por eso, debajo del capó, hay diferentes conductos que canalizan ese aire y lo hacen pasar por el filtro del aire para que el motor pueda funcionar correctamente.
Sin embargo, los motores no funcionan con agua. Es más, en caso de que entre agua, lo más probable es que se produzca una grave avería en el motor. No va a pasar gran cosa porque el motor se moje como tal, pero el estropicio puede ser gigantesco si el agua entra por esas tomas de admisión y llega hasta el interior de los cilindros. Y no, el filtro de aire no podrá detener esas grandes cantidades de agua.
El motivo de esa gran avería es que el agua no se puede comprimir. Por eso, cuando entra en el motor, si el pistón sube llegará un momento en el que no pueda seguir avanzando, y acabaremos doblando una biela, que es lo más habitual. Al mismo tiempo, la entrada de agua sucia por la presencia de barro también dañará irremediablemente las paredes de los cilindros o las guías de las válvulas, por ejemplo. Cualquiera de estas dos averías supondrán una reparación de más de 2.000 euros, y tirando por lo bajo.
La clave está en la altura
¿Cómo evitarlo? Debemos calcular al altura del charco. Todo lo que sea superar más o menos una altura de más de la mitad de la rueda ya supone un riesgo, por lo que ante esa tesitura lo mejor es no atravesar el charco si es posible. Hasta mitad de la rueda lo normal es que haya suficiente margen.
Sin embargo, es también muy importante que el agua no cubra el capó. Y eso, aunque el charco no llegue a esa altura, sí puede ocurrir en caso de que queramos atravesarlo puy rápido y provoquemos una gran ola o salpicadura. No pasa nada porque el capó quede cubierto pero, si es por una ola, esa altura del agua también podría anegar el colector de admisión del coche…y tendríamos la misma avería.
¿Estamos a salvo si tenemos un SUV o un todo terreno? No. Es más, ante la duda debemos aplicar la misma técnica de no superar nada que supere con claridad la mitad de altura de la rueda.
Sí, habrás visto muchos todo terreno superando grandes charcos con el capó cubierto de agua, pero seguro que en esos vídeos verás un snorkel, una toma de aire que va por el exterior de la carrocería y que es por donde el motor toma el aire. En esos coches, salvo que el snorkel también quede anegado, no debería haber mayor problema.
Fuente: Aurofacil
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