Aunque no sepas nada sobre mecánica seguro que has escuchado hablar sobre el AdBlue, y si estás entre los propietarios de coches diésel modernos lo más probable es que conozcas bien esta tecnología.

Y es que todos los coches diésel modernos incluyen el sistema AdBlue del que no debemos descuidar su mantenimiento porque, de lo contrario, podemos sufrir algunas averías. Por este motivo, un mecánico nos cuenta cuáles son los problemas del AdBlue y desvela algunos trucos para evitarlos.

¿Qué averías puede provocar el AdBlue en tu coche?

La entrada en vigor de la normativa Euro 6 en 2014 hizo obligatorio que los coches diésel instalaran un sistema para reducir las emisiones contaminantes: unos catalizadores de reducción selectiva (SCR) con inyección de líquido AdBlue que se almacena en un depósito independiente.

El procedimiento es muy sencillo: el catalizador SCR inyecta una cantidad de AdBlue (solución química a base de urea) que, al entrar en contacto con las partículas contaminantes que se generan con la combustión, produce una reacción química.

En concreto, cuando se mezclan el AdBlue y los gases de escape se produce un proceso de hidrólisis que convierte el óxido de nitrógeno (NOx) fruto de la combustión en nitrógeno (N) y oxígeno (O₂).

Los problemas de AdBlue pueden producirse cuando este líquido se cristaliza debido a una fuga, y pueden afectar a la centralita, la bomba, el inyector, el depósito y otras partes del catalizador SCR. Averías cuya reparación pueden suponer desde unos 1.500 euros hasta 4.000 euros en un coche de alta gama.

Aunque lo más grave de quedarse con el depósito de AdBlue sin líquido o con él cristalizado es que el coche no arrancará. ¿El motivo? Que las emisiones de NOx se dispararán y, desde el punto de vista técnico, el motor creerá que está averiado. Por eso, para evitarlo los motores modernos no arrancan si el AdBlue se ha agotado.

Los consejos de un mecánico para evitar problemas con el AdBlue

«Os voy a enseñar cómo se reposta el AdBlue en vuestro vehículo y os voy a dar unas claves para intentar que se averíe el sistema de AdBlue lo menos posible o, por lo menos, alargarlo lo máximo en el tiempo», explica el mecánico del canal de TikTok ‘Talleres_Piba_Oficial’ al principio de este vídeo.

Comenzando por las claves o trucos para evitar problemas con el AdBlue, el mecánico explica que todos los talleres recomiendan añadir AdBlue en garrafa en lugar de hacerlo en las gasolineras. La razón es que los fabricantes de AdBlue les indican que los dos problemas por los que este líquido se deteriora son el tiempo de envasado y la temperatura.

«Cuando repostamos [AdBlue] en una gasolinera no sabemos el tiempo que está el AdBlue allí en su depósito. Si es una gasolinera con mucho tránsito pues estará poco, pero si tenemos la mala suerte de que sea una gasolinera en la que repostan muy pocos vehículos pues ese AdBlue supuestamente está mucho tiempo y no sabemos exactamente el tiempo», afirma el mecánico.

En la garrafa de AdBlue viene la fecha de envasado y, por este motivo, el mecánico recomienda 100 % siempre utilizar AdBlue de garrafa.

Además, como indica el mecánico, en la boquilla de AdBlue de las gasolineras se quedan restos de AdBlue cristalizados; mientras que en la garrafa siempre viene una cánula nueva y no tendrá esos restos.

Por otro lado, el mecánico apunta que igual que sucede con el aceite del motor y otros productos entre los líquidos de AdBlue también hay diferentes calidades con diferencias de precio de entre 10 y 15 euros. En este caso debemos tener cuidado porque hay AdBlue bueno y menos bueno, y para saber la calidad del AdBlue el mecánico señala que hay unos refractómetros (en la imagen de arriba) con los que podemos medir el tanto por ciento de pureza del AdBlue, que es una disolución de entre el 30 % y el 35 % de urea.

Así mismo, el mecánico nos cuenta que ya se comercializa el anticristalizante de AdBlue que se puede añadir en la garrafa de AdBlue y mezclarlo para luego echarlo en el depósito de AdBlue; y si no tenemos garrafa directamente se vierte el anticristalizante en el depósito antes de echar el AdBlue.

La siguiente cuestión que el mecánico aborda es la de cómo se reposta AdBlue. «Siempre hay que usar protección, por supuesto, guantes y gafas», puntualiza el mecánico. A continuación, se introduce la cánula en el depósito de AdBlue y se echa el líquido. «Todos los depósitos suelen ser de 11,5 ó 12 litros, las garrafas son de 10 litros, así que siempre que nos haya indicado el vehículo que nos quedan 1.000 ó 1.100 kilómetros es porque nos caben perfectamente los 10 litros«, concluye el mecánico.