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A medida que surgen nuevas oportunidades de movilidad compartida prácticamente en todas partes, los actores de la automoción deben aprovechar las verdaderas necesidades de los consumidores para encontrar el camino hacia el éxito a largo plazo. Aquí tenemos una encuesta de McKinsey sobre este tema.

Los ecosistemas de movilidad urbana se enfrentan a difíciles desafíos mundiales que las soluciones de movilidad compartida pueden ayudar a responder. Es una oportunidad multimillonaria para los actores de la movilidad en los tres principales casos de uso de movilidad compartida: movilidad reclamada, micromovilidad compartida y uso compartido de automóviles (las opciones de micromovilidad incluyen e-kickscooters, bicicletas tradicionales o eléctricas y ciclomotores tradicionales o eléctricos).

Estimamos que el fondo de valor de mercado global actual para la micromovilidad compartida es de solo 10.000 a 15.000 millones de dólares, en comparación con los 110.000 a 130.000 millones de dólares para la movilidad reclamada y los 4.000 a 5.000 millones para compartir automóviles. Pero las ofertas de movilidad compartida están en aumento en todas partes, y las partes interesadas deben comprender la opinión del consumidor sobre las ofertas, así como sus preferencias de adopción.

Tomando el pulso del consumidor sobre la movilidad

La encuesta McKinsey Mobility Consumer Pulse Survey pregunta regularmente a los usuarios de movilidad de todo el mundo sobre sus percepciones y preferencias cuando se trata de movilidad futura, con soluciones de movilidad urbana compartida que desempeñan un papel fundamental.

Los patrones de movilidad hoy en día siguen estando centrados principalmente en el automóvil para muchos consumidores. Sin embargo, los encuestados de todos los grupos demográficos hablan con una voz clara para que esto cambie drásticamente en la próxima década, con los consumidores acudiendo en masa a modos de movilidad compartidos y más sostenibles y planeando reducir su uso de vehículos privados (Gráfico 1).

Más de una cuarta parte de los encuestados que viven en áreas urbanas dicen que están pensando en deshacerse de sus vehículos privados por completo, reemplazándolos con otros medios de transporte en el futuro. El contraste urbano vs. rural para los resultados es considerable, ya que menos del 15% de los encuestados que viven en áreas rurales pueden verse prescindiendo de sus automóviles privados. Según los resultados de nuestra encuesta, las consideraciones de sostenibilidad, la eficiencia de los viajes y la mejora de los medios de vida en el centro de la ciudad desempeñan un papel central en el cambio de las opciones de movilidad de los consumidores; costo, menos.

Tres modos de movilidad probablemente más afectados

Creemos que tres categorías de modos de transporte muestran el mayor potencial de disrupción: lanzaderas autónomas compartidas; soluciones de micromovilidad, como e-kickscooters, e-ciclomotores y e-bicicletas; y alternativas de minimovilidad, como vehículos eléctricos L6 y L7 con tres o cuatro ruedas, una masa en vacío superior a 100 kg y capacidad para uno o dos pasajeros.

Más del 60% de los usuarios de movilidad global en nuestra encuesta están abiertos a utilizar un servicio de transporte autónomo compartido como parte de su combinación de movilidad en el futuro. Los transbordadores autónomos compartidos podrían sacar los vehículos existentes de la carretera con más frecuencia, ya que el 42% de los encuestados dispuestos a usar el nuevo modo de transporte indican que reemplazarán sus viajes en automóvil privado (Gráfico 2).

Como tal, las flotas de transbordadores autónomos compartidos podrían ayudar a resolver los desafíos clave de movilidad urbana de congestión, estacionamiento, contaminación del aire por el tráfico, muertes y muchos otros problemas sin canibalizar la infraestructura de transporte público existente de una ciudad. Los encuestados se ven a sí mismos utilizando lanzaderas autónomas compartidas en una amplia gama de casos de uso ocasionales y regulares: conexiones entre el centro de la ciudad y el aeropuerto (26%), supermercados (26%) y viajes diarios (24%) encabezan la lista.Las soluciones de micromovilidad han ganado escala y popularidad generalizada entre los usuarios urbanos en los últimos años por su conveniencia como alternativas de viaje sostenibles. Como uno de cada tres usuarios de movilidad en áreas urbanas en nuestra encuesta planea usar la micromovilidad sustancialmente más a menudo en el futuro, esta tendencia sin duda continuará. Entre los encuestados urbanos, el 37% afirma que una infraestructura de micromovilidad mejorada marca el primer paso hacia su panorama ideal de movilidad futura, mientras que el 33% está de acuerdo en que las soluciones de micromovilidad pueden reemplazar hasta el 50% o más de sus viajes en automóvil hoy (Gráfico 3). Si bien sigue siendo popular a escala en las ofertas de movilidad compartida, la propiedad privada de vehículos de micromovilidad, especialmente los scooters eléctricos, puede aumentar pronto, ya que más del 60% de los encuestados indican un interés en poseer un scooter y solo usar servicios compartidos ocasionalmente en el futuro.

La alternativa de minimovilidad despierta un gran interés de los encuestados (Gráfico 4). De los encuestados que viven en áreas urbanas, el 27% considerará integrar microautos en su combinación de movilidad en la próxima década, y cada segundo uno de ellos puede imaginar reemplazar sus automóviles privados con tales microautos a largo plazo. Los encuestados se ven a sí mismos integrando microcoches de manera integral en su combinación de movilidad en un amplio conjunto de casos de uso, los tres principales son las compras de comestibles (48%), la realización de actividades de ocio (47%) y los desplazamientos al trabajo (35%). Mientras que el 20% de los encuestados prefiere usar tales vehículos como parte de flotas de movilidad compartida, una mayor proporción indica la voluntad de poseer uno ellos mismos.

Más allá de los nuevos modos de movilidad y factores de forma, los encuestados esperan que las operaciones de transporte público desempeñen un papel clave en el panorama de la movilidad urbana del futuro, especialmente dado el acceso y la asequibilidad. La investigación sugiere que tres temas de expectativas del consumidor atraviesan esta atracción del consumidor por más soluciones de movilidad compartida en el futuro. El primero es la integración de las experiencias de los usuarios en las ofertas de movilidad dentro de las ciudades, incluidas las posibles tarifas planas combinadas. El segundo es tener una infraestructura accesible, segura y confiable. Y el tercero es un cambio hacia vehículos electrificados en operaciones de movilidad compartida como la norma de facto.

A medida que los elementos de movilidad compartida continúan multiplicándose, las innovaciones emergentes, como las alternativas de minimovilidad y los transbordadores autónomos compartidos, tienen el potencial de interrumpir la industria de maneras nuevas y emocionantes. Tanto los operadores de movilidad como los nuevos participantes deben anticipar tres temas de consumo: las personas quieren experiencias de usuario integradas, infraestructura segura y accesible, y electrificación continua.

(Autores: Kersten Heineke, Soukayna Lakhsassi, Felix Rupalla y Darius Scurtu en mckinsey.com.

Fuente: http://www.asepa.es/

Antonio Mozas
Director de ASEPA (Asociación Española de Profesionales de Automoción)

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