El catalizador, o también llamado convertidor catalítico, es un elemento clave de los coches para limpiar los gases nocivos que se expulsan por el tubo de escape antes de que salgan al exterior. Te contamos todo acerca del catalizador.
La necesidad de preservar el medio ambiente y la salud de las personas fue el detonante para que se pusieran en marcha las normativas de emisiones. Así, los vehículos tienen que cumplir unos determinados márgenes de emisiones para poder homologarse… y, para ello, el catalizador es un elemento clave. En Europa tenemos la normativa Euro, y los vehículos también se clasifican con etiquetas en función de sus emisiones, pudiendo los más respetuosos acceder a las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
¿Qué es un catalizador?
En este sentido, uno de los actores fundamentales para reducir las gases contaminantes de los vehículos ha sido el catalizador. También conocido como convertidor catalítico, se trata de una pieza que va instalada entre los colectores de escape y el primer silencioso de la cola de escape. Está formado por una estructura de material cerámico con forma de panal de abejas. En su interior incluye sustancias activas como óxido de aluminio o metales nobles como platino, rodio, paladio… así como agentes que se encargan de regular la acción del catalizador cuando entran los gases de escape.
¿Qué coches llevan catalizador? Los más antiguos pueden no llevarlo, aunque todos los vehículos de nueva factura están obligados a tenerlo. Tanto los vehículos diésel como los gasolina disponen de un catalizador, y es que este elemento ayuda a reducir las emisiones nocivas para la salud y el medio ambiente que salen del escape.
¿Cómo funciona el catalizador de un coche?
Una vez los gases procedentes del motor llegan al catalizador, este se encarga de transformar dichos gases en dos fases:
- Primera fase: oxida el monóxido de carbono (CO) y los hidrocarburos sin quemar y los convierte en dióxido de carbono (CO2) y agua.
- Segunda fase: produce la reducción de los óxidos de nitrógeno (NO), convirtiéndolos en nitrógeno (N).
Eso sí, la transformación de estos gases es parcial, ya que las sustancias derivadas del catalizador, como es el caso del CO2, sigue siendo un gas contaminante y nocivo para el medio ambiente.
¿Cómo saber si un catalizador está mal?
Al contrario de lo que se piensa, la rotura del catalizador es muy común, ya que es un elemento que se somete a altas temperaturas y al filtrado de sustancias y gases contaminantes continuamente. Ocurre cuando se acumulan demasiados gases de escape sin quemar en el catalizador y éste no es capaz de eliminarlos por completo, algo que genera que las emisiones contaminantes se incrementen.
En los vehículos de gasolina, esto pasa cuando se hacen mayoritariamente trayectos cortos o porque las bujías están en mal estado; en los diésel, ocurre principalmente por dos razones: realizar muchos recorridos cortos (sobre todo, urbanos) y circular con el motor muy bajo de vueltas (menos de 2.000 rpm).
Por lo general, es posible detectar esta avería a través de los testigos del panel de instrumentos (un motor iluminado en color ámbar). Un fallo del catalizador puede provocar pérdida de potencia e incluso el coche puede llegar a pararse por la obstrucción del mismo, por lo que es una avería que conviene solucionar cuanto antes. Por último, al pasar la ITV también se puede detectar la avería por la prueba de gases contaminantes.
En el caso que nos ocupa, si quieres cambiar esta pieza puedes echar un vistazo a los catalizadores de Daparto, una página web que aglutina las marcas más reconocidas de repuestos de coche y catalizadores como Bosal, Dinex, Walker o Vegaz. En cuanto a precios, estos se sitúan desde los 100 hasta los 270 euros en función del modelo y el vehículo en cuestión.
¿Cómo limpiar un catalizador?
Si finalmente nuestro catalizador se ha averiado, nuestra recomendación es acudir a un taller de confianza o a un sitio especializado. La reparación de un catalizador vacío o roto se puede hacer mediante dos modos de reconstrucción: montando un catalizador estándar soldable de recambio -solución habitual para vehículos Euro 1 y Euro 2- o limpiándolo mediante chorro de arena; solución que permite aprovechar la carcasa exterior y reemplazar los monolitos internos. No obstante, también existe la opción de sustituirlo, ya que así evitaremos fallos en un futuro próximo.
Escrito por: Nicolás Merino
Fuente:: Autofácil
Suscríbete a laNewsletter de gestión de flotas
Curso ONLINE para la gestión de flotas de vehículos
Advanced Fleet Management Consulting, Webfleet Solutions, Optimatics, Mobileye, GantaBI, Unigis, Eccocar, y Alcoa Wheels organizan el “Curso para la Gestión de flotas de vehículos” con el fin de formar a los profesionales en gestión de flotas a tomar una visión global y conocer todas las actividades y factores clave involucrados en la gestión de una flota de vehículos.
El curso es único y presenta un enfoque innovador con los objetivos de reducir costes y optimizar la gestión de la flota.
info@advancedfleetmanagementconsulting.com
o
Rellena el siguiente formulario para recibir la información del curso y te puedas inscribir.