Todos los vehículos que circulan en España están obligados a portar las placas homologadas de la matrícula que les corresponde. Y a cada vehículo se le asigna un código alfanumérico, por lo que siempre es única.

En total, en España, existen 13 tipos diferentes de matrículas: además de la ordinaria que llevan la mayoría de vehículos (coches, furgonetas, camiones, motocicletas etc.), hay vehículos que portan otras específicas. Puede ser por tipología del mismo o para distinguirlas por pertenecer a un organismo dado.

Suelen diferir en el color del fondo y de los caracteres, aparte de tener una nomenclatura diferente a las ordinarias. Repasamos todas la matrículas con las que la DGT permite circular en nuestro país y que define el Reglamento General de Vehículos.

Matrículas ordinarias: diseño, letras permitidas y personalización

El actual sistema de nomenclatura de matrículas llegó en septiembre del año 2000. En ese momento se pasó de la numeración provincial alfanumérica (letra asignada a provincia + cuatro dígitos + dos letras), a la nacional alineada con los países de la UE.

La DGT estima que este sistema garantiza 40 años de registros de placas diferentes. Es decir que en 2040 habrá que aplicar uno diferente.

Cómo debe ser. Esta placa, según recoge el Reglamento General de Vehículos en su Anexo XVIII tiene que incluir la siguientes características:

• Colores. Con fondo blanco autoreflectante y con los caracteres en negro mate.
• Caracteres alfanuméricos. Se dividen en dos bloques: cuatro cifras numéricas que van del 0000 al 9999; tres letras del alfabeto.
• Logo UE. En el lateral izquierdo se incluye el logo de la Unión Europea  (fondo azul y estrellas amarillas) y la letra E en blanco que identifica el país (en nuestro caso España).

¿Se excluyen algunas letras? Sí, de las 27 letras que conforman nuestro alfabeto, en esta nomenclatura nunca se incluyen las vocales y tampoco dos consonantes.

Y tiene un motivo. Según la DGT, las vocales se descartaron por evitar la formación de palabras que podían resultar cómicas o malsonantes como ANO o PIS. O bien formar nombres, por ejemplo EVA, ANA, ADA, JON o LUZ, así como diminutivos como BEA o ELY.

Aún así, con las consonantes permitidas, se dan denominaciones curiosas como KGB, BBC, KFC, JFK, BMW, GTR… la lista es larga.

Por su parte las consonantes excluidas son la Ñ y la Q. Y se debe a algo menos mundano y anecdótico: se eliminaron porque se pueden confundir con la N y la O o la cifra cero respectivamente.

No en vano, sería un problema para tecnologías basadas en sistemas de identificación de lectura de matrícula, por ejemplo ante la denuncia de un radar o para acceder a un párking.

Las letras CH y LL tampoco se incluyen, pues supondría ubicar cuatro letras. Aunque lo cierto es que estas dejaron de estar presentes en el alfabeto desde 1994, cuando la Real Academia Española decidió suprimirlas.

¿Se puede personalizar la matrícula? No. O más concretamente muy poco. Según la normativa:

Sin perjuicio del color del fondo establecido para cada placa de matrícula, se permite la inclusión de diseños geométricos sin significado reconocible, siempre que no afecten a las condiciones de retrorreflexión y legibilidad necesarias para el correcto funcionamiento de sistemas de captación de imagen de las autoridades competentes en materia de tráfico.

En definitiva, motivos geométricos sobre el fondo sin variar el color y sin que impidan la correcta visibilidad de la numeración de la matrícula.

Placas de matrícula especiales

Si bien la mayoría de vehículos matriculados en España portan la placa ordinaria, existen placas específicas para ciertos vehículos por su función o periodicidad. Son las denominadas matrículas especiales.

En ellas se engloban las de ciertos organismos como cuerpos de seguridad o de transporte público de viajeros, pero también las provisionales.

Estas placas son algunas de las “raras” que podemos encontrarnos por la carretera y pueden variar en colores y nomenclatura.

Matrícula de vehículo histórico

Si se matricula un automóvil o vehículo como histórico, para lo que hay que cumplir una serie de requisitos, dispondremos de una matrícula diferencial.

Está formada por tres bloques de caracteres:

• Letra H (referente a Histórico).
• Cuatro cifras, que irán desde el 0000 al 9999.
• Tres letras, comenzando por BBB y terminando por ZZZ. Se excluyen las mismas letras que en la ordinaria: las cinco vocales y las consonantes Ñ y Q.

En cuanto a los requisitos, el Reglamento de Vehículos Históricos exige criterios como la antigüedad (mínimo 30 años), que tenga un interés especial (haber participado en un hecho importante o pertenecido a una personalidad), o la exclusividad (series limitadas o vehículos de colección).

Esta calificación es otorgada por el órgano competente de cada Comunidad Autónoma y la validez de esta matrícula es indefinida.

Además de la matrícula diferencial, contar con un vehículo histórico tiene ciertas ventajas. Como por ejemplo plazos más amplios para pasar la ITV o no verse afectado por las Zonas de Bajas Emisiones (en Madrid por ejemplo se incluyen entre las excepciones permanentes para circular por sus diferentes áreas restringidas al tráfico).

Matrícula de taxis y VTC

Desde agosto de 2019, los vehículos que prestan servicio público de transporte discrecional de viajeros, como los taxis y los VTC (Vehículos de Transporte con Conductor como Uber, Cabify etc.) deben llevar obligatoriamente una placa trasera específica.

Se creó para evitar fraudes a clientes ante la llegada de los VTC, ya que no son como los taxis que van pintados de manera específica y con luminosos.

La nomenclatura es la misma que en las ordinarias pero el fondo ha de ser azul y los caracteres en blanco mate. De hecho, delante, estos vehículos portan la ordinaria de fondo blanco con las letras y números en negro.

Matrículas de vehículos de las fuerzas del Estado

Son las que llevan los vehículos pertenecientes a diferentes cuerpos de seguridad como por ejemplo la Guardia Civil o la Policía Nacional, pero también autonómicos como la Ertzaintza.

La placa es de fondo blanco y los caracteres van en negro. En cuanto a la nomenclatura también es en tres bloques: va precedida de unas siglas especiales (que identifican el cuerpo de seguridad) seguidas de cuatro cifras (del 0000 al 9999) y una última letra.

Estas siglas son las siguientes:

• PGC: vehículos de la Guardia Civil.
• CNP: vehículos del Cuerpo Nacional de Policía.
• E gótica y un número: vehículos de la Ertzaintza.
• CGPC con banda roja: vehículos de la policía canaria.
• ET: vehículos del Ejército de Tierra.
• EA: vehículos del Ejército del Aire.
• FN: vehículos de las Fuerzas Navales.
• FAE: vehículos de los Cuarteles Generales Militares Internacionales de la OTAN matriculados en España.

Esta también se aplica a vehículos pertenecientes a organismos estatales, por ejemplo un ministerio dado:

• MF: vehículos del Ministerio de Fomento.
• MMA: vehículos del Ministerio de Medio Ambiente.
• PME: vehículos del parque del Estado.

Matrículas de vehículos de servicio diplomático

Las placas de matrícula de vehículos o coches de servicio diplomático las asigna el Ministerio de Asuntos Exteriores para el transporte de diplomáticos, cónsules o altos funcionarios. Su validez es indefinida, aunque se revisa anualmente.

Las hay de diferentes tipos según al cuerpo o misión a los que identifican, variando las siglas iniciales y las cifras, que siempre van con un color de fondo y de caracteres específico.

Matrícula de Cuerpo Diplomático, con fondo rojo. Las placas están formadas por tres grupos de caracteres en color blanco sobre fondo rojo: las letras CD, dos cifras que identifican la Misión Diplomática (en suma, al país que representan) y dos o tres cifras corresponden a vehículos propiedad de la Misión Diplomática o a sus miembros.

Matrícula de Cuerpo Consular, con fondo verde. Disponen de tres grupos de caracteres en color blanco sobre fondo verde: las letras CC, dos cifras que indican la Misión Diplomática (país) y dos o tres cifras correspondientes a los vehículos propiedad de la Misión Diplomática o de la propia Oficina Consular.

Matrícula de Técnicos Administrativos, con fondo naranja. Se utilizan para identificar los vehículos del personal técnico-administrativo en misiones diplomáticas o bien de ciertos organismos.

Cuentan igualmente con tres grupos de caracteres, que van en negro sobre fondo naranja: las letras TA, dos o tres cifras identificativas de la Misión Diplomática, Organización Internacional u Oficina Consular y el número de orden de los vehículos pertenecientes a este personal técnico-administrativo.

Matrícula de Organismos Internacionales, con fondo azul. Tienen asimismo tres grupos de caracteres pero en color blanco sobre fondo azul: las letras OI, dos o tres cifras que identifican a la Organización y dos o tres cifras correspondientes a los vehículos de propiedad de la Organización o de sus miembros. Identifican los vehículos de Organismos Internacionales.

Matrículas de vehículos con autorización temporal

En ocasiones, a la espera de la matrícula oficial, se pueden expedir placas provisionales previas a la obtención de la definitiva del vehículo.

Se dividen en dos tipos diferenciados dependiendo si el titular es una persona física (particular o autónomo) o bien una persona jurídica (empresas y entidades).

Autorización a particulares. Tienen fondo verde y caracteres en blanco. Está compuesta por la letra P (de provisional), un número de cuatro cifras y tres letras.

Se aplican por diversos motivos: vehículos sin carrozar, procedentes del extranjero, adquiridos por subasta o sentencia sin matricular, etc.. Y tienen duraciones diferentes: de 10 días, 60 días, o para traslado del vehículo a la UE o al extranjero, donde se debe volver a matricular.

Autorización a empresas. Disponen de fondo rojo con los caracteres en blanco. Existen dos clases según la situación en que se encuentre el vehículo: vehículos no matriculados (S) y vehículos ya matriculados (V).

También con tres bloques, alberga una letra que varía en función de los tipos señalados (S o V), un número de cuatro cifras y tres letras. Además, se distinguen por contar con una franja lateral blanca con caracteres en rojo, donde se refleja la fecha de fin de validez.

Placas de matrícula de vehículos específicos

Por último, hay vehículos que, por tipología, deben portar una matrícula diferente a la ordinaria. Es el caso de los especiales, así como por ejemplo remolques o ciclomotores.

Matrícula de vehículos especiales

Se considera vehículo especial aquel concebido para realizar obras o servicios determinados. Dadas las características de su cometido, pueden sobrepasar las dimensiones o masas establecidas o bien quedar exentos de cumplir ciertas condiciones técnicas.

En este grupo se incluyen por ejemplo vehículos agrícolas (tractores, cosechadoras) así como excavadoras, apisonadoras o quitanieves, entre otros.

Su matrícula es de fondo blanco con los caracteres en rojo mate. En cuanto a la nomenclatura se divide asimismo en tres bloques: siempre incluye al principio la letra E (Especial), además de las cuatro cifras y las tres letras que se incluyen en las ordinarias.

Matrícula de remolques y semirremolques

Se considera remolque a vehículos que no tienen motor propio y que han de ser arrastrados por otro. Se incluyen remolques de transporte, pero también por ejemplo caravanas o carros camper.

Por su parte los semiremolques tampoco disponen de propulsor, pero solo pueden ir acoplados a la cabeza tractora de un camión.

La placa de matrícula de estos vehículos de arrastre es en fondo rojo y las letras en negro. La nomenclatura siempre comienza con la letra R (Remolque) junto a los dos bloques de las ordinarias: cuatro dígitos y tres letras.

Matrícula de ciclomotores, triciclos y cuadriciclos ligeros

Las placas de estos vehículos van en fondo amarillo con los caracteres en negro y, a diferencia del resto de las placas, pueden ser verticales. Asimismo, tienen unas dimensiones más reducidas como ocurre con las motocicletas.

Divididos en tres grupos de caracteres, siempre comienzan por la letra C (Ciclomotores) seguida de cuatro cifras y otras tres letras.

La portan vehículos de categoría L1e o ciclomotores: vehículos de dos ruedas con motor de cilindrada menor o igual a 50 cc o eléctricos con una potencia inferior o igual a 4 kW (5 CV).

Pero también por ejemplo triciclos (L2e), con propulsor de idénticas características, o cuadriciclos ligeros (L6e), cuyo peso no excede de los 350 kg y con propulsores también menores o iguales a 50 cc o de 4 kW (5 CV).

Estos vehículos se pueden conducir el permiso AM, que puede obtenerse desde los quince años de edad. Aunque para llevar pasajeros se deben haber cumplido los 18 años. Para obtenerla se exige una prueba teórica y otra práctica.

Matrículas de quads

En el caso de estos vehículos recreativos de cuatro o más ruedas, las matriculas se dividen atendiendo al tipo de vehículo en el que se clasifican por peso y mecánica.

• Quads ligeros. La placa es de fondo amarillo con los caracteres en negro. Es decir como las de los ciclomotores, pues a efectos son cuadriciclos ligeros. Así, pesan menos de 350 kg, no superan los 45 km/h y su cilindrada es de 50 cc o bien de un máximo de 4 kW de potencia.
• Quads pesados. Su matrícula es la ordinaria, con fondo blanco y letras negras. Se trata de aquellos de más de 350 kg y hasta 400 kg.
• Quads especiales. Las placas que identifican estos vehículos son con fondo blanco y las letras en rojo: las mismas que identifican a los vehículos especiales. En su caso, se trata de quads que superan los 400 kg.

 

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