Las innovaciones en el reparto de mercancías han llegado a un punto en el que la creatividad parece ser el factor diferenciador. Ahora tocó a la startup española Revoolt proponer una respuesta peculiar pero eficiente en apariencia: el uso de patinetas eléctricas como herramienta para la logística de última milla.
Tomando como “pretexto” la dificultad de las entregas a domicilio en sitios muy poblados de las grandes urbes, la empresa quiere llevar sus modelos de cero emisiones a otro nivel, por lo que comenzó con esta aventura en Madrid, España, hace unos meses.
El CEO de la firma, Ángel Sánchez, aseguró en un comunicado que las bondades de la batería y el motor de su patineta eléctrica permiten “cubrir perfectamente una ruta de entrega cercana”.
Además, resaltó que se trata de un vehículo ligero y no contaminante que sortea perfecto las dificultades de tránsito en zonas urbanas complicadas, cerradas o con restricciones de acceso.
Pruebas a propuesta de logística de última milla
“Este vehículo unipersonal permite logística de carga media/alta y puede circular además por el carril de bicicletas, aparcar en aceras anchas y acceder prácticamente hasta la misma puerta de los clientes”, señaló el principal representante de Revoolt.
La idea es que la accesibilidad de estos dispositivos permitan mejorar los tiempos de entrega, además de que brinda una mayor independencia a los repartidores y exige mucho menos esfuerzo de su parte.
Sustentabilidad, eficiencia y autonomía: Ventajas de las patinetas eléctricas en las entregas de última milla
No es raro ver patinetas eléctricas, monopatines u hoverboards en las aceras y el asfalto de las grandes ciudades, los cuales se han convertido en una alternativa más para movilizarse.
Sin embargo, la regulación de estas nuevas formas de desplazamiento es un tema pendiente, pero las grandes ciudades ya contemplan discusiones para adaptarlas a la distribución y movilidad urbana.
Ejemplo claro son las bicicletas, ahora un modo de moverse indispensable en algunas capitales del mundo.
Además, tiene a su favor que se trata de un dispositivo de propulsión no contaminante y que alimenta su carga por medio de corriente eléctrica. El ser amigable con el medio ambiente es otro aspecto que hace que algunas empresas lo consideren como apropiada para entregas de última milla.
Características de patinetas eléctricas
En lo que las autoridades encargadas del tránsito y movilidad se pronuncian al respecto, la empresa realiza pruebas con su primera flota de patinetas eléctricas para el reparto de alimentos con el fin de analizar si son prácticas y funcionales para resolver problemas logísticos de última milla.
Estos modelos de prueba poseen las siguientes características:
– Autonomía de carga completa de 50 kilómetros, que se consigue en cinco horas.
– Capacidad de hasta 300 kilogramos de peso.
– Una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora.
Y, desde luego, sin emisiones de carbono, lo que encanta a los defensores de la logística verde.
Su manejo sencillo es otro rasgo a considerar, pero sobre todo, que puede moverse por calles estrechas donde otros vehículos como camiones o furgonetas de reparto no pueden acceder.
El costo mínimo estimado por la empresa para su uso es de 0.8 céntimo de euro por cada 100 km.
Otros casos de vehículos para logística de última milla
El mes pasado, la Secretaría de Movilidad de Bogotá, Colombia, puso en marcha el programa piloto BiciCarga, con el que se realiza la entrega de última milla de mercancías a través de bicicletas.
El programa piloto tendrá una duración de seis meses y se llevará a cabo en las localidades de Usaquén, Engativá y Teusaquillo.
En tanto, como respuesta a la crisis derivada del Covid-19, Rappi inició la entrega de pedidos con robots de la mano de KiwiBot, empresa especializada en el desarrollo de estos dispositivos.
Ese programa piloto tuvo una duración de tres meses en la zona de El Poblado, en Medellín, Colombia.
Todavía más futurista es la propuesta de Ford y Agility Robotics, quienes se unieron para desarrollar robots autónomos de aspecto humanoide para entregar paquetes.
Digit, el robot desarrollado por esas firmas, podría convertirse en la norma en los próximos años, aunque por el momento no es factible debido a los altos costos y el tiempo de producción de esta solución.
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