Cada vez con una mayor presencia en las primeras posiciones de los tablas de matriculaciones, los coches eléctricos poco a poco empezarán a inundar el mercado de segunda mano. Un reciente estudio, sin embargo, anuncia que los coches eléctricos de último generación que paulatinamente se irán incorporando al mercado de coches usados sufrirán una rápida depreciación.

En Híbridos y Eléctricos ya hemos mirando antes al mercado de segunda mano para, en un artículo, recopilar cuáles eran los coches eléctricos usados más asequibles de todos cuantos había anunciados. En todos los casos se trataba de los primeros eléctricos fabricados en serie a principios de la pasada década; coches eléctricos que conformaban la primera hornada de una oferta que en Europa es cada vez mayor.

Ahora, según un estudio de Bähr & Fess y del que Focus.de se ha hecho eco, los coches eléctricos que están protagonizando el último órdago comercial de cada fabricante, verán cómo sus precios, una vez lleguen al mercado de segunda mano, se verán fuertemente reducidos.

Evolución tecnológica, el arma de doble filo para el comprador primigenio

El motivo por el que sufrirán esta rápida depreciación reside en la precocidad con la que la tecnología está avanzando. Prácticamente a diario vemos titulares pasar por nuestra portada, con el nombre de algún gran fabricante anunciando una mayúscula inversión en movilidad eléctrica, y esto para el cliente final se traduce en tecnología punta.

Ford Mustang Mach-E eléctrico.

Los coches eléctricos están llamados a convertirse en un gadget más del día a día, y al igual que un smartphone, un televisor o un ordenador, dada la rápida evolución del mercado en el que se mueven, su tecnología se verá obsoleta en un corto periodo de tiempo. Esto el sector de la movilidad eléctrica se traduce a que cada nuevo modelo electrificado ofrecerá mejor autonomía y tecnología a un precio cada vez más competitivo, por lo que la oferta del mercado de ocasión resultará menos atractiva cuanto más lo sea la oferta de coches eléctricos nuevos.

La fuente autora del estudio se atreve, incluso, a diagnosticar qué modelos van a ser los que menos valor están llamados a perder. Entre ellos apunta, curiosamente al SEAT Mii eléctrico y al Skoda Enyaq, si bien es cierto que mientras que el SEAT Mii eléctrico es un coche de relativamente bajo valor, por lo que porcentualmente es lógico que se deprecie menos, el SUV eléctrico checo plantea la misma tecnología y espacio que el Volkswagen ID.4 ligado a un precio de partida sustancialmente menor, por lo que en relación a sus rivales, es normal que la pérdida de valor sea menos acusada.

Sea como fuere, lo cierto es que se trata de una gran noticia para el sector de la movilidad eléctrica, ya que esto no hará más que acelerar la transición hacia el coche eléctrico para muchos bolsillos que no puedan optar por comprar los 38.000 euros que cuesta, de partida, un Skoda Enyaq de nueva factura.

El estudio también menciona en particular a Tesla, y lo difícil que hace pronosticar el comportamiento de los precios de los coches de Elon Musk en el mercado de segunda mano, dadas las constantes actualizaciones y variaciones de precio del fabricante americano. Es precisamente por estas actualizaciones y variaciones en las tarifas de compra lo que debería propiciar un precio menor de un Tesla de segunda mano, pero lo cierto es que son los coches que menos tiempo han de estar anunciados hasta que encuentran comprador.