Aunque CEYC y Euskalduna sean a efectos oficiales dos marcas diferentes, ambas deben tratarse juntas debido a la estrecha relación existente entre ambas.
CEYC es el acrónimo de Centro Electrotécnico y de Comunicaciones (a veces se define al CEYC en algunos trabajos como ‘Centro Electrónico y de Comunicaciones’, pero es evidente que la electrónica era inexistente en esas fechas. ‘Electrotécnico’ es lo correcto), y era una sección militar especializada en comunicaciones, especialidad por la que en el ámbito del automovilismo y el motociclismo solía ser muy solicitado para establecer líneas de comunicación a lo largo de un circuito o en el recorrido de una carrera en cuesta.
En los años a los que hace referencia este artículo, su director era el coronel José Tafur Funes, y en un momento dado se decidió llevar adelante la construcción de un pequeño automóvil diseñado por el capitán Juan Antonio Hernández Núñez, cuya finalidad era la de hacer de enlace para el propio Ejército.
Se trataba de un automóvil de dimensiones reducidas del estilo del recién presentado Citroën 5HP y similares, habiendo puesto énfasis en que fuese lo más sencillo y económico posible, tanto de construcción como de mantenimiento, reduciendo al máximo el número de piezas, para lo cual se le equipó de un motor muy singular de cuatro cilindros en línea, estando cada par de cilindros comunicados entre sí.
El coche fue presentado a las autoridades militares en 1923 y al público en el III Salón del Automóvil de Barcelona de 1924 en un stand del propio CEYC, iniciándose por entonces la construcción de varias unidades, señalando como anécdota que dentro del Ejército, el coche pasó a ser conocido con el apodo de ‘Juanito’, y en las exposiciones en las que se mostró se hacía gala de que el automóvil era totalmente nacional, desde el diseño hasta los accesorios, si bien el encendido se efectuaba mediante una magneto Bosch.
Pronto empezaron a verse rodar los CEYC en varios escenarios y, entre ellos, por las polvorientas rutas de Marruecos al frente de convoyes, llevando a bordo a oficiales y mandos. También era frecuente verlos en los desfiles militares.
La fabricación en pequeña serie de los CEYC para el ejército había corrido a cargo de la compañía Euskalduna de Bilbao que lo había producido desde 1924, llegándose a un acuerdo con dicha compañía para que lo fabricase en serie con destino al público en general, motivo por el que en el IV Salón del Automóvil de Barcelona celebrado en 1925 se volvió a presentar a este coche más dotado de accesorios, como correspondía a un turismo, en vez de la austeridad propia de los vehículos de vocación militar, hablándose de una primera serie de 300 unidades cuya fabricación se iba a realizar en las instalaciones
de la Compañía Euskalduna en Madrid en las que también se harían las carrocerías, comercializándose el vehículo con la marca Euskalduna, reservándose el nombre de CEYC para las unidades con destino al Ejército. El precio adelantado era de 5.500 pesetas por coche. La representación de la marca en Barcelona correspondía a la firma Representación de Automóviles, S.A.
En el V Salón del Automóvil de Barcelona celebrado en 1927 había ya dos stands separados, el del CEYC y el de Euskalduna, que presentaba en esta ocasión una versión cerrada y otra abierta, pero la realidad es que el coche no tuvo demasiado éxito y en 1928 cesó su producción.
Euskalduna tenía al parecer diseñado otro vehículo de mayor tamaño que no llegó a producirse y en el que probablemente intervino también el capitán Hernández. Este coche fue bautizado con el nombre de Diana, habiéndose dicho que su motor sería de 10 HP fiscales y que, además de su versión turismo, podría dar lugar a una camioneta.
Señalaremos que en los primeros años treinta aparecieron varios CEYC matriculados como coches nuevos, lo que puede inducir a error, ya que ello no se debía a que se siguiesen fabricando, sino que se trataba de unidades que pasaban al ‘estado civil’ al ser subastados por el Ejército, ya que en éste tenían matrícula militar.
Características técnicas
Motor: De dos tiempos, sin válvulas ni camisas. Bloque de cuatro cilindros de 60×70 mm con los
cilindros comunicados dos a dos entre sí. Cilindrada real 593 c.c. Cilindrada aparente
791 c.c. Potencia efectiva: 10-12 CV a 3000 rpm. Cigüeñal sobre tres cojinetes.
Carburador Zenith y enfriamiento por termosifón, radiador de nido de abejas.
Embrague: De cuero, tipo ‘cono invertido’, con reglaje automático.
Transmisión: Por árbol de un solo cardán de cuero al cromo.
Frenos: En las ruedas traseras. De tambor.
Suspensión: Por cuatro medias ballestas.
Bastidor: Estampado: Batalla: 2,37 m. Vía: 1,12 m.
Equipo eléctrico: Bosch. Grupo magneto-dinamo-motor de arranque, con luces población y carretera.
Consumo de gasolina: 6 litros cada 100 km.
(Artículo de Pablo Gimeno, Comisión Técnica de Históricos de ASEPA)
Fuente: http://www.asepa.es/
Antonio Mozas
Director de ASEPA (Asociación Española de Profesionales de Automoción)