Las cajas de cambios Allison llevan mucho tiempo utilizándose en vehículos urbanos propulsados a base de gas natural comprimido (GNC) que se destinan a la recogida de residuos, al mantenimiento de calles y a la distribución de mercancías.

Actualmente su uso se está extendiendo hacia la distribución regional, al ser capaz de cubrir recorridos cada vez mayores, pero también se ve una tendencia a incorporar nuevas soluciones 100% eléctricas.

Gran eficacia

Las cajas de cambios Allison son conocidas por su eficacia en vehículos urbanos propulsados por GNC. Gracias a que se transmite el par motor de forma continua a las ruedas, incluso cuando se cambia de marcha, se mejora la maniobrabilidad y la capacidad de reacción del vehículo. Así, se permite el mismo rendimiento que tienen los vehículos diésel.

Ahora, el uso de las transmisiones Allison se amplía a todas las actividades de distribución. “Debido a los requisitos medioambientales, cada vez más empresas de transporte se están pasando al GNC para sus actividades de distribución a mayor escala. Gracias a la mayor capacidad de gas a bordo que ofrecen los fabricantes y la sofisticación de las transmisiones Allison, hoy vehículos rígidos 4×2 ya pueden superar los 800 km de autonomía. Además, nuestro software FuelSense 2.0^® de gestión de cambio de marchas ha demostrado su adecuación para actividades de distribución en cualquier situación, como la gestión de marchas en cuestas, frenadas en cruces, etc.”, afirma Stéphane Gonnand, jefe de Desarrollo del Mercado de Allison Transmission Francia.

Las transmisiones Allison también son perfectas para vehículos 100 % eléctricos. De hecho, la caja de cambios usa su convertidor de par patentado, que multiplica el par motor, lo que aumenta la optimización de la gestión del motor eléctrico para mejorar la autonomía del vehículo.

Las cajas de cambios Allison llevan mucho tiempo utilizándose en vehículos urbanos propulsados a base de gas natural comprimido (GNC)

En cuanto a vehículos eléctricos, la solución de hidrógeno está en la fase de arranque. En los primeros camiones fabricados en masa con pila de combustible (el Hyundai XCient Fuel Cell) se han empleado transmisiones completamente automáticas Allison.

El pasado mes de octubre se entregaron en Suiza siete vehículos (de un pedido de 50) para actividades de distribución. Para el año 2025 se prevé que haya en toda Europa 1.600 vehículos de este modelo dedicados a la distribución en el continente.

Allison Transmission también ofrece productos pensados íntegramente para su uso en vehículos electrificados, bajo la marca Allison eGen. Esta gama incluye tanto soluciones de propulsión eléctrica híbrida como soluciones de propulsión 100 % eléctrica. Actualmente, incluye eGen Flex y eGen Power.

eGen Flex es un sistema de propulsión eléctrica híbrida que incluye una innovadora unidad de propulsión, inversor y sistema recargable de almacenamiento de energía. La unidad de propulsión utiliza un embrague que permite que el vehículo funcione incluso con el motor apagado.

Desde 2003, Allison ha entregado más de 9.000 sistemas de propulsión eléctrica híbrida en todo el mundo. Estos sistemas llevan casi 2.600 millones de kilómetros recorridos, lo que constituye un ahorro de más de 1.300 millones de litros de combustible y 3 millones de toneladas de CO₂. Los nuevos modelos eGen Flex son el resultado de esta experiencia práctica acumulada.

Por su parte, eGen Power es el segundo producto de la gama eGen de Allison. Esta gama es una familia de ejes 100 % eléctricos para vehículos comerciales medianos y pesados, que incluye el modelo eGen Power 100D, lanzado recientemente.

Varios fabricantes están empleando actualmente productos eGen Power. Hino Trucks y Hezagon Purus decidieron integrar el Allison eGen Power 100D en el camión Hino XL7 exhibido recientemente durante el anuncio que Hino Trucks hizo el 5 de octubre de 2020 del programa “Proyecto Z”, de desarrollo de vehículos cero emisiones.

Escrito por Saúl Camero