Son varios los cambios anunciados para la industria de la automoción en 2021. Algunos afectan a los fabricantes, otros a los conductores y los hay que tendrán repercusión para ambos. Hoy nos centramos en el cambio fiscal que va a impulsar la ventas de vehículos eléctricos en 2021, que no es otro que el nuevo impuesto de matriculación.

Todo apunta que 2021 marcará un punto de inflexión para el mercado de eléctricos. En 2020 las ventas de enchufables han ido creciendo de manera continuada. Se espera que el próximo año afiance este crecimiento y que la cuota de mercado para los vehículos eléctricos siga aumentando.

Varias son las razones que justifican este argumento. Una de las más importantes permitirá tachar otro punto de la lista de razones para no comprar un coche eléctrico: la diferencia de precio entre esta tecnología y la combustión.

Así será el impuesto de matriculación en 2021

El Gobierno ha anunciado importantes cambios en la fiscalidad del automóvil para el año que está a punto de comenzar.

Cancelado el aumento de la tasa fiscal aplicada al diésel, sí se mantiene la intención de modificar el actual impuesto de matriculación. Esta tasa se abona en el momento en que se cierra la compra del coche. Su cuantía se establece en función de las emisiones de dióxido de carbono homologadas por el vehículo a matricular. Actualmente, el sistema premia a los vehículos más limpios, hasta el punto de que el 74% de las matriculaciones salen exentas del pago de este impuesto.

• Hasta el 31 de diciembre de 2020, el impuesto de matriculación se abona en los siguientes tramos (el porcentaje se aplica del precio franco fábrica, es decir antes de impuestos):
  • 0 % para vehículos con emisiones menores o iguales a 120 g/km de CO₂
  • 4,75 % para vehículos con emisiones mayores a 120 g/km y menores de 160 g/km de CO₂
  • 9,75 % para vehículos con emisiones mayores o iguales de 160 y menores de 200 g/km CO₂
  • 14,75 % para vehículos con emisiones mayores o iguales a 200 g/km CO₂
• A partir del 1 de enero de 2021, según la propuesta del Ejecutivo, solo los coches eléctricos quedarán exentos del pago del impuesto de matriculación. La reforma fiscal establece los siguientes tramos (su aplicación no tiene, de momento, confirmación oficial:
  • Emisiones 0 gr/km: 0%
  • Emisiones de 0 a 49: 2,75%
  • Emisiones de 50 a 80 gr/km: 4,75%
  • Emisiones de 81 a 120 gr/km: 7%
  • Emisiones de 121 a 140 gr/km: 9%
  • Emisiones de 141 a 160 gr/km: 11%
  • Emisiones de 161 a 170 gr/km: 12%
  • Emisiones de 171 a 190 gr/km: 13%
  • Emisiones de 191 a 200 gr/km: 14%
  • Emisiones de más de 200 gr/km: 15%

El precio de los coches de combustión se acercará a los eléctricos

Hay otro factor que encarecerá el precio de los vehículos de combustión y no el de los eléctricos a partir de 2021: finalizada la prórroga de dos años, entrará en vigor el ciclo de homologación de consumo y emisiones WLTP.

A partir de enero, los fabricantes tendrán que realizar de nuevo las mediciones, que serán más precisas que las realizadas hasta ahora. Esa mayor precisión implicará que un mismo vehículo puede ahora arrojar distintos valores y ser considerado más contamínate de lo que se estimaba hasta ahora. Concretamente, hasta un 20 ó 30% más contaminante.

Con la medición WLTP, gran parte de los vehículos van a dejar de estar exentos o van a saltar de tramo, con el consiguiente encarecimiento del precio. Según cálculos del sector, van a pasar a pagar el impuesto al menos un 50% de los coches que se venden en España, frente al 20% actual. Traducido en dinero, para el mercado de combustión supondrá un encarecimiento de la factura de hasta 1.700 euros.