La flota de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes, con una edad media de 5,72 años, es de las más modernas de Europa y cuenta con vehículos que incorporan los últimos avances tecnológicos en materia de seguridad, confort, exigencias medioambientales y accesibilidad universal.

Con motivo de la política de medio ambiente y movilidad que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Madrid, la EMT no prestará servicio con autobuses de gasoil y toda su flota estará compuesta por autobuses eléctricos, de gas natural e híbridos a partir de enero de 2023.Este plan se llevará a cabo con la compra de 520 vehículos de Gas Natural Comprimido (GNC) que la EMT acaba de licitar.

Con ello, se consigue adelantar en tres años lo establecido al respecto en el plan de calidad del aire, en el que se ponía 2025 como año límite para que todos los autobuses de la EMT fueran flota limpia o CERO. Actualmente, Madrid todavía alberga 388 autobuses públicos diésel en la flota de 2.100 autobuses que componen la EMT.

100 nuevos autobuses eléctricos

Con un presupuesto total de 161,2 millones de euros, los 520 autobuses de GNC llegarán en varias tandas. La primera de ellas, en 2021, también dotará a Madrid de 100 autobuses 100% eléctricos, así como 6 minibuses eléctricos, que harán que la flota CERO de Madrid sume 179 vehículos a finales del año que viene. También, el porcentaje de electrificación del parque de la EMT crecerá hasta el 8%.

Electrificación de la capital

El Ayuntamiento también anunció hace pocos días su intención de realizar un gran despliegue de puntos de carga por toda la ciudad. En concreto, el consistorio invertirá dos millones de euros la instalación de siete puntos de recarga ultrarrápida en enclaves estratégicos, 53 equipos de acceso público de recarga rápida, 70 equipos de recarga save tipo wall box para vehículos eléctricos de la flota municipal y 35 puntos para recarga intermedia en vía pública.

Además, a partir del año que viene y hasta 2023, a través de Cambia 360, la línea de ayudas de Madrid 360, concederá 12 millones de euros en subvenciones para situar puntos de recarga para flotas urbanas con un alto volumen de recorridos.