La industria del bodegaje no ha quedado indiferente a los cambios que ha experimentado el país durante los últimos meses, cambios que han motivado a los proveedores de este tipo de servicios a concentrar y enfocar sus esfuerzos hacia el fortalecimiento y mejora de la experiencia del cliente y la calidad de servicio, aspectos claves para el éxito del negocio en los ya denominados “tiempos de pandemia”.
En el ámbito del bodegaje, el servicio al cliente ha estado por siempre relacionado con la capacidad de las empresas de diseñar soluciones acordes a las necesidades específicas de sus clientes, crear una relación de confianza entre las partes, donde la comunicación y capacidad de respuesta es fundamental y sobre todo entregar aspectos para todos relevantes como calidad de las instalaciones, seguridad, buena ubicación, flexibilidad, etc.
Hoy, en tiempos complejos para todos, estas cualidades cobran aún más valor. ¿Qué tan enfocados están las empresas en satisfacer las necesidades de sus clientes? ¿Cómo ha cambiado esta crisis la visión y proyección de la industria? Son algunas de las preguntas que las empresas han debido responder para diseñar y ajustar su negocio de cara al futuro. Para conocer cómo se han desenvuelto las empresas en este periodo conversamos con David Furman, COO de Empresas Danco y Sebastián Ulloa, Gerente Industrial de Grupo Patio.
ESTADO DEL ARTE DE LA INDUSTRIA
Con la intención de conocer el momento que vive la industria del bodegaje y cómo proyectarse es necesario ahondar en algunos aspectos que han marcado al sector durante el primer semestre. Para eso, recurrimos al informe industrial de JLL, empresa de servicios inmobiliarios, estudio correspondiente al primer semestre 2020.
El estudio arrojó que durante el primer semestre del año se registró una producción de 83.400 m2 de bodegas clase A y B, principalmente en el submercado Poniente (con casi 65 mil m2). Esto representa un crecimiento del 2,4% del stock total en relación con el periodo anterior.
La situación económica actual a nivel país y sus proyecciones han influido en la toma de decisiones y el desarrollo de nuevas etapas o centros de bodegas industriales, aunque no en todos los casos, debido a que algunos proyectos siguen adelante, aseguró JLL. Estas decisiones por parte de los desarrolladores se traducirían en una menor oferta de la esperada para el segundo semestre.
Así, y para conocer las dimensiones de esta industria, el estudio afirma que el stock total de bodegas, clase A y B, asciende a 3.536.000 m2 en los cinco submercados. Un aspecto relevante para considerar, y que da luces de cómo se ha movido este mercado, es la vacancia existente. Al cierre del primer semestre del año, se registró según el informe una vacancia total de 10,2% en el mercado de bodegas industriales (clase A y B), lo que corresponde a 360.500 m2 disponibles, aumentando en 4,8 puntos porcentuales en relación con el segundo semestre del año anterior, informado por el mismo estudio.
Según JLL el aumento de la vacancia se debería principalmente a: “un aumento en la disponibilidad producto del término de grandes contratos que se trasladaron a centros logísticos propios, lo que explica en un 70% el aumento de la vacancia; la producción de 83.400 m2, de la cual se arrendó un 60% aproximadamente al cierre del semestre y nueve meses de adversidad económica a nivel país, afectando a unos rubros más que a otros y/o empresas que no estaban preparadas para enfrentar una situación como la actual”.
A pesar de que la vacancia llegó a los dos dígitos, aún se encuentra en parámetros saludables, a juicio de la empresa, considerando que se ubica en el límite superior del rango saludable, el que va del 6% al 10% y sobre todo teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente.
Finalmente, en cuanto a las proyecciones, el estudio de JLL correspondiente al primer semestre DE 2020, reconoce que, en los últimos nueve meses, dos hechos importantes han afectado a la economía de Chile, por una parte, los hechos ocurridos a partir de octubre del año pasado y por otro lado, la pandemia de Covid-19, a partir de marzo. “Esto ha impactado en las expectativas de crecimiento económico del país y también en la demanda por metros cuadrados de bodegas industriales, sin embargo, no es posible cuantificar aún el impacto de estos dos acontecimientos en el mercado de bodegas industriales.
Sin embargo, se espera que los efectos del Covid-19 sobre la economía vayan disminuyendo a fin de año, permitiendo una reactivación económica a partir de 2021” se plantea en el estudio. Según los analistas de JLL, para el segundo semestre del año la producción se ubicaría entorno a los 30 mil m2, por debajo de los 66 mil m2 que se proyectaban a fines del año pasado, en el mismo estudio, principalmente debido a la postergación del desarrollo de algunas etapas. Esta cifra es considerablemente menor en comparación a la registrada en el segundo semestre de años anteriores. Por otro lado, según el análisis, no se esperan más movimientos de empresas a centros de distribución propios por grandes superficies, como los registros en la primera mitad de este año.
DESAFIADOS Y ATENTOS
Un desafío. Así han definido, casi la totalidad de los sectores industriales y comerciales los efectos que ha generado el Covid-19 en sus negocios. Las cosas han cambiado. Hoy los negocios son mirados desde otro prisma, debiendo en muchas ocasiones reajustar o redefinir sus planes y objetivos, y también modificar, en muchas ocasiones, sus operaciones en el día a día.
La industria de bodegaje y almacenamiento también se ha visto removida por compleja realidad, ya sea nivel de mercado como también es su operativa interna. En este sentido, David Furman, COO de Empresas Danco, reconoció que “hemos sido desafiados desde el ámbito físico y emocional de una persona hasta la sobrevivencia de las empresas. El sector servicios es, sin duda, el más golpeado, por su imposibilidad casi absoluta de operar. Las empresas de productos e infraestructura han tenido algo más de suerte y es donde se encuentran nuestros clientes. Esto está muy lejos de ser una situación tranquila”.
El ejecutivo de Danco agregó que la situación actual de la industria obliga “a ser muy cuidadosos en tres elementos: intentar generar venta cómo se pueda (aquí el e-Commerce ha sido el comodín), bajar costos y ser extremadamente cuidadoso con el flujo de caja”.
Por su parte, el Gerente industrial de Grupo Patio, Sebastián Ulloa, indica que se ha visto “un crecimiento en la demanda y solicitudes para una mayor flexibilidad de espacio, de manera de que los módulos de bodega puedan crecer momentáneamente”.
La situación general ha obligado, según Ulloa, “a poner todos nuestros esfuerzos en poder apoyar y acompañar a los clientes, estar más cerca de ellos y conocer más en profundidad sus negocios. En otras palabras, este es un momento para estar más unidos que nunca”.
ASPECTOS QUE MARCARÁN DIFERENCIAS
En los últimos años, atributos como la ubicación, el tipo de construcción y los servicios anexos como seguridad o bienestar para los colaboradores eran aquellos factores que marcaban diferencias en una industria cada vez más competitiva. Sin embargo, hoy la mirada, como se ha señalado anteriormente, ha dado un giro hacia aspectos más blandos e intrínsecos de las compañías: como la comunicación, la cercanía, la flexibilidad.
Para David Furman, si bien la calidad de las instalaciones y su ubicación, serán variables siempre importantes; “desde el estallido social, la seguridad cobró un gran valor y la pandemia ha agregado una variable crítica, que nace como respuesta a la incertidumbre; la flexibilidad”. “La flexibilidad se manifiesta de múltiples formas, que podríamos categorizar en 2 grupos: flexibilidad operacional, por ejemplo, lo que implica implementar nuevos protocolos de operación, reducir al mínimo los procesos no esenciales, reaccionar a las restricciones impuestas por el Minsal, implementar en pocas semanas el canal online, implementar teletrabajo, etc. Y también está, la flexibilidad financiera, donde están, por ejemplo, la reducción de personal, utilización de medidas tributarias disponibles, disminución brusca de costos, manejo estricto del flujo de caja, flexibilización de costos)”.
“En Danco hemos dedicado mucha energía en ayudar con algunas de las medidas financieras mencionadas. Entendemos que tenemos que navegar esta crisis en colaboración con nuestros clientes. Nuestra relación con ellos es de largo plazo y por ende debemos ser cooperativos. Para poder ayudar hemos mantenido una comunicación fluida con nuestros clientes, atendiendo cada caso en su mérito. Medidas variables de superficies, cobros flexibles, holgura en los plazos de pagos, son algunas medidas de flexibilidad que hemos adoptado”, detalló Furman.
Sebastián Ulloa, ahondó sobre la importancia de la comunicación y la cercanía con los clientes. “En Grupo Patio siempre hemos estado de la mano con nuestros clientes, en particular con las pymes, y con el foco siempre puesto en las personas. Por esto mismo, la cercanía y la comunicación constante con los clientes son elementos esenciales de nuestras relaciones comerciales”.
Y es, según Ulloa, gracia a la estrecha relación con sus clientes que “siempre estamos atentos a sus requerimientos y nos adaptamos a sus necesidades. Asimismo, nos preocupamos de entregarles el mejor servicio, incluyendo el resguardo de sus productos bajo estrictas medidas de seguridad y monitoreo permanente”.
INCERTIDUMBRE Y OPORTUNIDADES
¿Cómo se visualiza el segundo semestre 2020? ¿Qué viene para la industria? ¿Cómo se moverá el mercado una vez que tengamos una “nueva normalidad”? Incertidumbre y oportunidad son los conceptos en los que ambos ejecutivos coinciden para describir el presente y futuro de la industria. El Gerente Industria de Grupo Patio se declara confiado en cómo se irá moviendo la industria, el segundo semestre, asegurando que “se prevé una mayor demanda de almacenamiento y bodegaje. La segunda mitad del año va a estar marcada por el cierre de contratos en los que apuntamos a afianzar las relaciones comerciales”.
En tanto, David comentó que, dada la incertidumbre actual, “los clientes (y nosotros también) están actuando con prudencia. La prudencia indica ser conservadores con los compromisos que uno toma. Sin embargo, vemos un segundo semestre donde la demanda por nuestro servicio estará dada por potenciales clientes que buscan, ya sea mejorar el servicio de centros logísticos (seguridad y flexibilidad aquí son lo fundamental) o también porque su actual ubicación no cubre sus requerimientos actuales”.
En tanto, Ulloa enfatizó en los retos que enfrenta la logística y en las oportunidades y caminos que tiene la industria del bodegaje y almacenamiento para avanzar, argumentando que “es el momento para incorporar más operadores logísticos a los centros de bodegas y clientes finales como las pymes, pero la principal oportunidad está en absorber los requerimientos de última milla tipo hubs urbanos. Estos hubs son una realidad y tendremos que estar preparados para este tipo de formatos”, agregó. La diversificación en regiones también es un aspecto para considerar para Grupo Patio por lo que busca potenciar sus proyectos en Antofagasta y Puerto Montt.
El COO de Danco también mira la penetración del comercio electrónico como una oportunidad. Al respecto, Furman sostuvo que “estamos muy entusiasmados de la penetración del e-Commerce, tanto en nuestros actuales clientes actuales como en los potenciales. El mundo online requiere una operación logística distinta, sobre todo en su proceso de preparación de pedidos, que implica un layout diferente, más intensivo en metros cuadrados”.
“En definitiva, a pesar de la pandemia sanitaria y su efecto económico, tenemos relativamente buenas perspectivas para este segundo semestre en la medida que mantengamos foco en ofrecer flexibilidad a nuestros clientes”, recalcó Furman.