Volvo, poco a poco, está empezando a dar los primeros pasos de cara a lograr su objetivo de que para 2025 estén vendiendo más de un millón de coches electrificados cada año. En base a ello, la rama de Volvo en Reino Unido habría empezado a retirar, silenciosa y paulatinamente, la oferta de motores diésel de entre la gama sueca para favorecer todas aquellas versiones electrificadas, tanto híbridos, como híbridos enchufables y coches eléctricos.

Así lo habría confirmado, en una consulta de Carscoops a Volvo Cars en Reino Unido, Barnaby Jones, ejecutivo de comunicaciones de la compañía, que habría declarado que su intención global de eliminar al diésel a largo plazo se habría visto complementada por un fuerte cambio en la demanda de sus clientes, ya que habrían experimentado una bajada en la demanda de coches con motores diésel, pasando de ocupar una cuota de ventas del 36,5% durante todo 2019, habiendo bajado hasta un 19% durante la primera mitad del actual 2020.

Esta estrategia de eliminación gradual del diésel en todos los mercados en los que Volvo comercializa sus productos, sería parte de la estrategia de electrificación global de los productos de la compañía, aunque el mismo ejecutivo de comunicaciones de Volvo declara que aún habiendo eliminando el diésel de su gama en Reino Unido, sigue siendo uno de los fabricantes con más amplia oferta en cuanto a tipos de motorizaciones, que van desde eléctricos puros, a híbridos enchufables, híbridos e hídridos ligeros, además de las tradicionales mecánicas de combustión interna de gasolina sin ningún tipo de electrificación, que presumiblemente sean las próximas de la lista en desaparecer en los años venideros.

Esto se habría visto reflejado en la oferta de su SUV compacto, el XC40, de manera que ya no tendría ninguna mecánica diésel a la vista, quedando sólo las versiones híbridas y gasolina a la venta. Hecho que valdría de antecedente para saber cómo actuará Volvo en el resto de Europa en los próximos meses.

Con este paso Volvo se estaría adelantando a la posible prohibición de las ventas de coches únicamente movidos por motores de combustión interna, que se habla que podría pasar en Reino Unido para 2035, y que, según una reciente encuesta, gran parte de la población habitante en las islas británicas vería bien.

Por tanto, Volvo no se deje amedrentar por la actual situación que ha propiciado la pandemia generada por el COVID-19, y sigue firme en su posición de electrificar toda su gama, y es que como ya avisara el CEO de Volvo, Håkan Samuelsson,  esta situación no haría más que acelerar los planes de la compañía de que para 2025 en 50% de sus ventas correspondan a estas versiones, y prueba de ello sería que a pesar de que las ventas de Volvo hayan caído, sus coches electrificados han subido un 80% sus ventas en todo el mundo