Entre los elementos encargados de proteger a un ocupante en caso de accidente, los airbags son unas de las grandes estrellas. Aunque tal vez, el airbag de cinturón sea uno de los menos conocidos.
Un vehículo actual, está dotado de sistemas que evitan un siniestro, pero dado el caso de producirse, existen otros componentes que van a provocar que las lesiones e impactos contra el conductor, ocupantes, peatones o ciclistas se minimicen, reduciéndose al máximo las consecuencias del golpe o accidente.
La seguridad pasiva son aquellos sistemas incorporados en un vehículo que tienen la misión de minimizar las lesiones o muertes en el momento que se produce un accidente. Uno de los componentes que forman parte de la seguridad pasiva de un vehículo es el sistema de airbag en todas sus variantes.
El airbag o bolsa de aire se monta en combinación con el sistema de cinturón de seguridad. Es una bolsa que, bien mediante el sistema mecánico que se incorporaba hace años, o bien mediante el funcionamiento electrónico de la actualidad, ante un impacto, se inflada en milésimas de segundo cuando los sensores detectan un impacto fuerte.
En la actualidad, los airbag que podemos encontrar son: airbag frontales, laterales, de cortina, de rodillas, centrales, airbag que envuelve al vehículo por completo, airbag para peatones, airbag trasero, airbag central delantero y el airbag de cinturón de seguridad.
El airbag en el cinturón de seguridad, también denominado air belt, es un dispositivo que cumple dos funciones de seguridad pasiva, reduciendo y minimizando las lesiones que una persona puede sufrir ante un impacto. Es un airbag que va instalado en el cinturón de seguridad y que se llena de aire cuando una serie de sensores han detectado el impacto, denominándose también como cinturón de seguridad hinchable.
Este tipo de cinturón de seguridad se está instalando en los asientos traseros y tienen la misión de reducir las lesiones que puedan generarse en un impacto en el cuello, en el pecho, etc., ya que, en la parte trasera no se incorporan airbag frontales y este sistema de air belt puede ayudar a conseguir un nivel de protección similar.
Como cualquier airbag normal, el airbag de cinturón se infla en 40 milisegundos, cuando los sensores han detectado un impacto fuerte. Tiene una ventaja con respecto a los demás airbag y es que las cargas en el cinturón se reparten por la superficie corporal cinco veces más amplia, consiguiendo que se reduzcan las consecuencias que se generan por producirse una deceleración muy brusca.
Otra característica que tiene este sistema de airbag, es que el aire comprimido que se utiliza para el llenado de la bolsa, lleva el depósito debajo de los asientos traseros y la bolsa se llena con aire frío, evitando con esto las típicas quemaduras que se producen en los demás sistemas de airbag al ser llenadas las bolsas con gas caliente.
Es un sistema de protección muy efectivo para los niños, porque son compatibles con los sistemas de retención infantil que incorporan los vehículos y adaptado también a personas de una edad más avanzada.
Este tipo de airbag es un dispositivo de seguridad pasiva que tiene el objetivo de minimizar las lesiones que se producen en un impacto, amortiguando con la parte acolchada las lesiones que pueden sufrir los ocupantes. Para que su funcionamiento se realice de una forma segura, en los vehículos en los que sea posible ajustar los asientos traseros, debemos tener regulado el cinturón a nuestra altura, el asiento colocado de forma correcta y que el cinturón no tenga ningún doblez, con el anclaje bien fijo en su broche.
Escrito por Juan Pedro Mateos-Aparicio
Fuente: https://www.autofacil.es
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