Un vehículo híbrido está compuesto por dos motores, un motor de combustión interna que utiliza como combustible la gasolina y un motor eléctrico que tiene la misión de proporcionar la fuerza y el par motor a las ruedas para que el vehículo se desplace.
La evolución de un vehículo híbrido es el híbrido enchufable, PHEV (del inglés plug-in hybrid electric vehicle), el cual realiza la recarga de las baterías a través de un enchufe específico para tal fin, pudiendo realizar la recarga en casa o en alguna estación que disponga de enchufe.
Las diferencias de unbhíbrido o híbrido enchufable con respecto a un vehículo convencional no son muchas y la respuesta es instantánea desde el momento que se pisa el acelerador, pero si tenemos un híbrido enchufable podemos elegir entre, solo movernos con motor eléctrico durante trayectos de decenas de kilómetros si las baterías o módulos disponen de electricidad suficiente o, si la carga de éstas es baja, podemos circular de forma híbrida.
Tanto el híbrido convencional como el híbridoenchufable son muy similares. Ambos tienen un motor híbrido y un motor eléctrico, pudiendo funcionar de manera independiente o combinada, en función de las condiciones y solicitaciones de potencia que el conductor desee.
La evolución de estos dos sistemas da como resultado que salga al mercado una estación de carga rápida de las baterías que podemos tenerla en nuestra casa o en el trabajo. Este sistema denominado por la marca BMW i Wallbox es una estación de carga rápida que hace que podamos circular fomentando la movilidad sostenible y que las emisiones de gases contaminantes sean cero.
Una de las ventajas que puede proporcionar este sistema es cargar nuestro vehículo sin tener que utilizar cables y pudiéndose utilizar tanto en vehículos híbridos y eléctricos. Está compuesto por dos bobinas, una de las cuales va incorporada debajo del vehículo denominada bobina secundaria y una placa base o denominada bobina primaria que se sitúa en el suelo del garaje o en la plaza de aparcamiento.
Entre las dos bobinas se genera un campo magnético y se transmite energía eléctrica de una bobina a otra sin que haya contacto físico ni cables por medio, transmitiendo los KW (kilovatios) necesarios para que la recarga de baterías se realice en un tiempo que ronda las 3 horas.
En el proceso de carga, cuando dejamos el coche sobre la estación, iniciaremos el proceso simplemente con accionar un botón, transmitiéndose los datos vía wifi entre la estación de carga y el vehículo. En el caso de lluvia y humedad, no afecta al sistema de carga al estar las bobinas protegidas, sin sufrir daños, pero si hay algún objeto en la placa, el sistema lo detecta y paraliza la recarga, avisando al conductor del problema.
El sistema BMW i Wallbox nos da la posibilidad de ver y activar la recarga de las baterías a través de una APP en nuestro teléfono móvil, sabiendo con este sistema cuanto queda de carga la batería o como va el proceso de recarga de la misma.
Escrito por Juan Pedro Mateos-Aparicio
Fuente: https://www.autofacil.es
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