La crisis sanitaria que ha afectado al mundo, desde comienzo de este año, ha dejado diversas lecciones, preocupación y también cambios de paradigmas, en diversos aspectos. En este sentido, la industria logística no ha estado ajena a esta situación y la continuidad operacional asoma como la principal preocupación del sector.

Las tecnologías tienen una gran prueba, en cuanto a su capacidad de responder a las necesidades operacionales de las empresas. “Actualmente la mayoría de las empresas están trabajando con la mitad de sus colaboradores en forma presencial o con horarios reducidos (para evitar la propagación del virus) y es aquí donde la tecnología ha demostrado estar a la altura de las circunstancias, respondiendo con real eficiencia, en apoyo a la continuidad operacional de las empresas”, afirmó Luis Santander, gerente de consultoría de Valgreti.

En este escenario el rol de las herramientas y soluciones tecnológicas ha sido -a juicio del ejecutivo- fundamental, dado que “la logística no puede detener su operación. Además, sabemos que el e-Commerce ha jugado un rol preponderante en esta crisis sanitaria y aquellas empresas que trabajan en forma integrada u sincronizada con el canal online tiene una real ventaja sobre el resto”.

En cuanto a las lecciones que esta situación ha dejado, Santander enfatizó en que nadie estaba preparado para esto y que, sin duda, desde hoy muchas cosas -del punto de vista laboral y comercial- cambiarán para siempre.

En esta línea, el gerente de consultoría llamó a fortalecer el autocuidado, fomentar el trabajo a distancia en las empresas y establecer reuniones periódicas en línea con los clientes para abordar temas de su operación, capacitaciones. “Todos debemos acostumbrarnos a este nuevo futuro, donde los clientes buscan el respaldo tecnológico que les permita cumplir sus metas y objetivos, lo que siempre están ligados con lograr la mayor eficiencia en su operación y para eso nosotros estamos muy preparados, entregando soluciones realmente innovadoras para un crecimiento sostenido y real”.