Las ventas de turismos eléctricos de ocasión han aumentado un 67% en España hasta febrero, registrando un total de 596 transacciones, aunque solo representan el 0,2% de las entregas totales del mercado nacional de segunda mano, según datos de Ideauto para la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam).

Para Ganvam, la renovación de flotas de ‘car sharing’ urbano, conformadas en buena medida por biplazas ‘cero emisiones’, está convirtiendo a los operadores de movilidad compartida en “fábricas de eléctricos de segunda mano”.

De hecho, en lo que va de año, el Smart Fortwo, el modelo que utiliza la compañía Car2Go en Madrid desde 2015, es el usado eléctrico más vendido, con un total de 127 unidades, seguido del Nissan Leaf, con 91 unidades, y del Smart ForFour, con 91 unidades.

“La movilidad compartida está haciendo más por el impulso del coche eléctrico en el parque que muchas iniciativas públicas. No solo está permitiendo eliminar la desconfianza que suponía conducir un eléctrico, sino que está generando oferta de segunda mano rebajando la barrera del precio de adquisición”, ha destacado el presidente de Ganvam, Raúl Palacios.

Por otro lado, los datos de Ganvam evidencian que, en un contexto de caída generalizada de matriculaciones en todos los segmentos, el mercado de ocasión es el único que crece. De hecho, ya se venden dos usados por cada nuevo. Concretamente, en lo que va de año se alcanzaron un total de 366.820 unidades vendidas, lo que supone un 5,4% más que hasta febrero de 2019.

Si atendemos a la distribución de ventas por fuentes de energía, los usados propulsados por gasolina son los que más crecen en lo que va de año, registrando una subida del 11%, con un total de 140.039 unidades.

Por su parte, los modelos diésel de segunda mano se contagian de la tendencia que vive el mercado de nuevos y ante la incertidumbre regulatoria reducen su crecimiento (+0,6%), a pesar de que siguen suponiendo el 59% de las ventas de ocasión.

Los vehículos híbridos enchufables apenas representan el 0,1% del mercado de segunda mano, mientras que los híbridos tradicionales suponen cerca del 1,5% de los modelos de ocasión vendidos en España hasta febrero.