Renault ha iniciado el proyecto de investigación Incit-EV, que tiene como objetivo probar siete tecnologías de carga innovadoras, entre las que se incluyen sistemas de carga inductiva en movimiento, bidireccionales e inteligentes. El proyecto se divide en dos fases y tendrá una duración de 48 meses. En este tiempo, y en colaboración con otras 32 empresas e instituciones, se analizarán los requisitos de los usuarios, se propondrán los diferentes sistemas de carga y se efectuarán demostraciones en lugares específicamente elegidos en toda Europa. Entre las ubicaciones se incluye España, que albergará un programa piloto de carga bidireccional de bajo voltaje en Zaragoza.

El proyecto Incit-EV tiene como objetivo demostrar el funcionamiento de diferentes soluciones de recarga innovadoras tanto en el ámbito urbano como en los desplazamientos de larga distancia. En cualquiera de los dos casos la experiencia se basará en el usuario, puesto que la intención de la iniciativa es que el despliegue de la movilidad eléctrica sea atractiva y adaptable al día a día de quien la va a utilizar. Por esta razón, todas las pruebas y experimentos estarán centrados en su utilización en condiciones reales.

El proyecto ha recibido financiación del programa de investigación e innovación Horizon 2020 de la Unión Europea, destinado a abordar todo tipo de soluciones de carga. En él participan compañías industriales, universidades, institutos, ciudades, nuevas empresas y pymes. Según Xavier Serrier, gerente de proyectos de sistemas de carga de vehículos eléctricos en el departamento de Investigación del Grupo Renault, “como empresa pionera de vehículos eléctricos en Europa, Renault es conocida por la buscar la innovación enfocada a los clientes”.

La iniciativa se puso en marcha en enero de 2020 bajo la coordinación del Grupo Renault y tendrá una duración de 48 meses, es decir, abarcará hasta diciembre de 2023. Durante este periodo se contemplan dos fases principales claramente diferenciadas. Durante la Fase 1, hasta abril de 2020, se analizarán las necesidades y requisitos de los usuarios. A partir de los datos recibidos de la fase informativa se pasará a la evaluación de las tecnologías de carga que se ensayarán y la forma de integrarlas en la infraestructura.

La segunda fase se centrará en la implementación de las demostraciones tecnológicas de cada una de las siete opciones seleccionadas. Se podrán en marcha en diferentes lugares seleccionados en toda Europa. Esta fase abarcará desde la segunda mitad de 2022 hasta la fecha final del proyecto.

Las soluciones de carga que se estudiarán y las ubicaciones previstas para los proyectos piloto demostrativos serán las siguientes:

• Sistema de carga de inducción dinámica para el entorno urbano en París, Francia.
• Sistemas de carga de alto voltaje en las afueras de Tallin, Estonia.
• Carga inteligente bidireccional optimizada en Ámsterdam y Utrecht, Holanda.
• Sistema de carga de inducción dinámica en áreas periurbanas de largo alcance en Versalles, Francia.
• Centro de carga en un aparcamiento para vehículos eléctricos de uso compartido en las afueras de Turín, Italia
• Carga bidireccional de bajo voltaje (también para vehículos de dos ruedas) y carga dinámica en carriles de taxis ubicados en el aeropuerto y la estación central de Zaragoza, España.