Bajo el nombre “La evolución de la tecnología + humanidad: construyendo una cadena de suministro para el éxito a largo plazo“, la compañía Coyote Logistics ha realizado una investigación en la que combina los resultados sobre proveedores y transportistas junto con la propia investigación de los clientes de la consultora que hace el estudio.

Del informe se desprende que transportistas y operadores se enfrentan, en líneas generales, a retos similares. Sus principales obstáculos son:

• Aumento de precios
• Incremento de la complejidad
• Escasez de capacidad
• Necesidad de flexibilidad y rapidez
• Mejora de la visibilidad en toda la cadena de suministro

La investigación muestra que, tanto transportistas como operadores tienen la misma opinión sobre el equilibrio que debe haber entre tecnología y conocimiento humano, a lo largo de las diferentes funciones de la cadena de suministro. Ambos hablan de una proporción de 60-40, respectivamente, lo que reafirma el posicionamiento sobre que ambos factores deben trabajar de forma conjunta para alcanzar el éxito en un mundo cambiante.

Joel Gard, responsable de Europa en Coyote Logistics, ha manifestado que “sabemos que en el mercado europeo de transporte por carretera, la tecnología y el potencial humano son necesarios para el éxito a largo plazo de la cadena de suministro. De los resultados del estudio hemos llegado a un entendimiento más profundo sobre los retos a los que transportistas y operadores se enfrentan ahora con relación a la evolución de las tecnologías, lo que nos permite dar un mejor apoyo a ambas partes con el conocimiento, recursos e ideas que ellos necesitan para satisfacer y superar sus objetivos de negocio“.

“Los mejores resultados se obtienen cuando la tecnología y las personas trabajan de manera conjunta para atender las continuas y cambiantes demandas del mercado y el consumidor. Y no pueden existir de manera independiente” Cristina Bottis, directora de marketing de Coyote Logistics

El estudio “Tecnología + Humanidad” ha analizado 13 tareas con el fin de conocer la capacidad que tienen los transportistas y operadores de mejorar la eficiencia en sus cadenas de suministro. Para ello, se ha investigado cuáles son las funciones más adecuadas para llevar a cabo por los profesionales, cuáles pueden ser optimizadas a través de la tecnología y las que necesitan una combinación de ambas. El resultado demuestra que el conocimiento humano es irremplazable en tareas creativas, en la toma de decisiones y en acciones que requieren un pensamiento estratégico, como la comunicación con clientes y la resolución de problemas relacionados con los envíos y entregas.

Sobre la automatización, transportistas y operadores han asegurado que la tecnología está mejor posicionada para reforzar las funciones operativas como la gestión de inventario o la reserva de envíos.

Aunque el estudio revela que son muchas las oportunidades que ofrece la tecnología para la cadena de suministro, las empresas encuestadas no identificaron ninguna función que pueda ofrecerse mejor sólo haciendo uso de la tecnología. Por contra, transportistas y operadores han defendido un balance de 60-40 para la tecnología y el conocimiento humano en las funciones de la cadena de suminuistro.

“La tecnología proporciona visibilidad y datos que son fundamentales para estrablecer la estrategia de la cadena de suministro, mientras que el conocimiento humano es decisivo para desbloquear las capacidades reales de las herramientas. Así, las personas convierten estos datos en prácticas iniciativas para la cadena de suministro y toman las mejores decisiones estratégicas para el negocio” ha asegurado Cristina Bottis, directora de marketing de Coyote Logistics.

Para alcanzar la combinación perfecta entre tecnología y personas, transportistas y operadores deben comenzar por evaluar su cadena de suministro actual e identificar las funciones que pueden ser desarrolladas por la tecnología y aquellas llevadas a cabo por personas. Partiendo de este punto inicial, los profesionales de la cadena de suministro deberían investigar las oportunidades que tienen en su negocio para incrementar su eficiencia e identificar errores que la tecnología o el talento cualificado puedan cubrir.