Los gases renovables
Los dos grandes retos para avanzar en la transición energética son, sin duda, la lucha contra el cambio climático y la mejora de la calidad del aire. Son dos desafíos clave para la sostenibilidad del planeta, pero para lograrlos aún nos queda camino por recorrer. Para conseguirlos, es necesario mejorar nuestro modelo energético hacia una producción de energía baja en carbono. Esta transición energética, que ya está en marcha y es imparable, tendrá éxito en la medida que se emita menos CO2 y otros gases de efecto invernadero como resultado de un sistema energético más sostenible.
En España disponemos de un mix energético diversificado para la generación eléctrica: se utilizan distintas fuentes de energía como la hidráulica, la fotovoltaica, la eólica, el gas natural, otros combustibles, como el carbón y el gasoil, o la energía nuclear. Lo idóneo sería que toda la energía que se produjese viniese de fuentes renovables. Estas fuentes renovables pueden ser eléctricas (eólica, por ejemplo) y no eléctricas. ¿Cuáles son éstas últimas? El biogás/biometano y el hidrógeno, opciones que están más desarrolladas en lugares como Suecia o Países Bajos, y más incipientemente en nuestro país.
Además de para la producción eléctrica, las energías renovables no eléctricas también se pueden usar como combustible para el transporte, industria y los sectores residencial y comercial. Asimismo, presentan la ventaja de que son fácilmente almacenables, a diferencia de la energía renovable eléctrica. Pero, ¿cuáles son exactamente y cómo se producen estas energías?
El biometano es la energía verde que se obtiene de nuestros residuos. El biogás, que es un gas formado principalmente por metano y CO2, proviene de la descomposición de la materia orgánica presente en las basuras, en las aguas residuales y también, en los residuos agrícolas, ganaderos y forestales (ver página siguiente). Este biogás se somete a un proceso de limpieza denominado upgrading en el que se eliminan distintas impurezas como el CO2. El objetivo de este proceso es obtener biometano: un gas con una composi-ción análoga a la del gas natural y, por tanto, se puede inyectar en la red de gasoductos.
Además del upgrading, para obte-ner biometano existe la opción de capturar CO2 de otras fuentes, como por ejemplo, la industria o las plantas térmicas de generación, y combinarlo con hidrógeno verde para obtener metano sintético. Es lo que se denomina ‘Power to gas’.
Es decir, el biometano es un gas natural de origen renovable que es una fuente de energía renovable continua, 24 horas al día, todos los días del año, con unas tasas de continuidad que no dan, de momento, otras fuentes renovables. El biogás y el biometano contribuyen al desarrollo de una verdadera economía circular, ya que son el resultado de una valorización adecuada de los residuos. El gas puede inyectarse en la red para su transporte, almacenamiento y usos finales como vehicular, industria y hogares.
En España existen plantas que producen biogás y lo queman para convertirlo, in situ, en energía eléctrica y calor en pequeñas plantas de cogeneración. Pero lo que supondría un avance significativo es el desarrollo de grandes plantas de biogás, en las que éste se transforma en biometano y se inyecta en la red de gasoductos, ya existente, con lo que puede transportarse a cualquier lugar y tener los mismos usos que tiene hoy el gas natural.
Según el informe ‘Optimal Use of Biogas from Waste Streams’, publicado por la Comisión Europea en diciembre de 2016, España se encuentra muy por detrás de los objetivos fijados en el Plan de Acción Nacional de Energías Renovables. Y eso que el país dispone de un gran potencial de producción de biogás y biometano, que podría cubrir una parte importante del consumo doméstico-comercial y también industrial.
A día de hoy, en España, la única planta de producción de biometano es la de Valdemingómez, en Madrid, que realiza la inyección en la red de Enagás, mientras que otros países europeos van mucho más avanzados: Alemania (196), Reino Unido (93), Suecia (71), Francia (44) y Suiza (36). El futuro en nuestro país pasa por construir plantas de producción de biometano, ya que la red de infraestructuras existente ya está preparada para transportar ese gas renovable: Enagás dispone de 12.000 kilómetros de gasoductos, 3 almacenamientos subterráneos y 6 plantas de regasificación.
Esta información es de Enagás, Edcreativo y eldiario.es.
Fuente: http://www.asepa.es/
Antonio Mozas
Director de ASEPA (Asociación Española de Profesionales de Automoción)
18º CURSO PARA LA GESTIÓN DE FLOTAS DE VEHÍCULOS-Barcelona 9-10-11 de Octubre 2019
Advanced Fleet Management Consulting, en colaboración con Jaltest, GantaBI, Optimatics y Transporte Profesional, organizan el “Curso para la Gestión de flotas de vehículos” con el fin de formar a los profesionales en gestión de flotas a tomar una visión global y conocer todas las actividades y factores clave involucrados en la gestión de una flota de vehículos. El curso es único en España y presenta un enfoque innovador al desarrollar una metodología propia para la gestión de flotas de vehículos.
Pincha en el siguiente enlace para saber más:
18º CURSO PARA LA GESTIÓN DE FLOTAS DE VEHÍCULOS-Barcelona 9-10-11 de Octubre 2019
]]>