Transformaciones en furgonetas y pick-up
Hay muchas empresas privadas y entidades públicas que han decidido utilizar vehículos completos para muchos servicios. Hablamos de vehículos comerciales, furgonetas o incluso pick-up que pueden ser matriculados según son vendidos (entenderá el lector que un chasis cabina incompleto, nunca podrá ser matriculado directamente ya que necesita ser completado por un carrocero).
Es cierto que el vehículo como medio de transporte y como herramienta de trabajo está inmerso en un profundo cambio. Hoy hablamos más del servicio que desempeña un vehículo que del propio vehículo. Es por ello que muchas operaciones no culminan con una compra sino que se opta por contratar un alquiler (de aquí en adelante, renting). En ocasiones es mucho más interesante pagar una cuota por un buen servicio y al finalizar el contrato el verdadero propietario del vehículo (el renting) decidirá qué hacer con él.
Desde luego que si una empresa decide comprar (un vehículo o varios) seguro que se contempla un periodo de amortización bastante elevado (si las averías y el desgaste no lo impiden), pero en este mundo el tiempo es dinero y una empresa de renting busca agilidad en la entrada y salida de vehículos antes de que se devalúen en exceso. Por eso prima equipar los vehículos sin destrozarlos, darles utilidad con fórmulas flexibles que otorguen a los vehículos la posibilidad de “ser o no ser” de forma rápida y barata.
El carrocero ha desarrollado auténticos centros de trabajo móviles: talleres y oficinas móviles, vehículos para la conservación de líneas eléctricas, telefonía, vending, servicios de emergencia, transporte de mercancías perecederas y un largo etcétera de transformaciones, que sin demasiado esfuerzo se desinstalan permitiendo al vehículo volver a ser lo que era antes de pasar por nuestras manos. Esa es la clave para que haya mejor retorno para el alquilador.
Es muy importante la elección del vehículo
Desde la perspectiva del transformador hemos de insistir en que es muy importante la elección del vehículo que se va a destinar a un servicio. Es posible adquirir vehículos iguales pero que son clasificados bajo diferentes criterios de construcción según Reglamento General de Vehículos.
Una furgoneta (dentro del sentido más amplio del término) puede llegar a ser clasificada en España como 24 (Furgoneta) para el transporte de mercancías en un espacio separado al de las personas llevando instalada una mampara de separación o como 31 (Mixto adaptable) sin mampara y apta para el transporte simultaneo de personas y mercancías o incluso puede ser un turismo con una clasificación 10 donde sólo está permitido el transporte de personas.
Será diferente transformar interiormente esta furgoneta en función de su clasificación, pero en todos los casos se pueden hacer cosas. Cada uno tiene sus puntos clave (mamaparas de separación, anclajes de asientos y cinturones, argollas para sujeción de la carga, campo de visión del conductor si queremos tapar los vidrios traseros, etc.) y debemos ser conscientes de lo que afectamos para conocer la viabilidad.
Agudizamos el ingenio y hemos llegado a soluciones muy prácticas, versátiles y compatibles con la legalidad.
Un pick-up no es un turismo a efectos de homologación
Por último nos gustaría recordar que desde el pasado 7 de julio de 2017 se ha tenido en cuenta que los vehículos pick-up se encuentran dentro del ámbito propio de un vehículo tipo turismo más que de un camión.
Por este motivo a este tipo de vehículo, cuya masa máxima no sea superior a 3.500 kg, en el que las plazas de asiento y la zona de carga no están situadas en un compartimento único y cuya altura total no sea superior a 2 m, les son de aplicación las mismas normas de circulación que a los vehículos tipo turismo (uso de carriles en sentido contrario al habitual, orden de preferencia en ausencia de señalización, adelantamientos, velocidades, niveles de servicio en situaciones de vialidad invernal, uso de carriles VAO,…) y se les asigna un nuevo código de clasificación por criterio de construcción con los dígitos 17.
Esto no significa que el pick up (que cumpla los requisitos) ahora sea un turismo a efectos de homologación. Es importante remarcar que solo lo será a efectos de circulación.
ASCATRAVI representa a nivel nacional tanto a los carroceros y transformadores que a día de hoy son fabricantes de segunda fase, como aquellos que reparan, reforman o transforman carrocerías.
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Salvador Nuñez Bustos
Secretario Técnico ASCATRAVI
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Fuente: https://www.transporte3.com/
José Miguel Fernández Gómez, es experto en gestión de flotas de vehículos, y el director de Advanced Fleet Management Consulting que suministra servicios de consultoría en gestión de flotas de vehículos
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