La comunicación en la conducción autónoma
La comunicación en la conducción autónoma es un reto importante que va a cambiar la relación entre los conductores y sus coches. La toma de datos y las decisiones que tomará el coche por sí mismo obligan a una nueva forma de comunicación en la conducción autónoma. Su sencillez es la clave para la aceptación de esta nueva tecnología.
Primeramente, la aceptación social de la conducción autónoma es clave para su implantación. La confianza que los conductores depositen sobre las decisiones de sus coches, depende de la forma de comunicarse con ellos. La posición de otros vehículos, peatones, objetos e infraestructuras son los datos de entrada requeridos para una toma de decisiones. En la manera de comunicarlo al conductor está la clave de la confianza en las decisiones tomadas.
Takashi Sonda, Director General Adjunto del Departamento de desarrollo de tecnología autónoma en Nissan y su equipo de ingenieros estudian nuevos sistemas de comunicación en la conducción autónoma. Tratan de dar respuesta a estas preguntas. “Hoy en día ya interactuamos con máquinas varias veces al día”. Los paneles de instrumentos, las pantallas, la navegación y las funciones de asistencia deben desarrollarse para otorgar confianza a los conductores.
La característica básica de la interfaz de comunicación debe ser la sencillez. El conductor debe conocer la información que está recogiendo el coche y las acciones que va a tomar para un viaje cómodo y seguro.
Un ejemplo de una situación de peligro es cuando se va a cambiar de carril en un adelantamiento y cuando se acerca un coche por el carril al que tenemos que movernos. O cuando un peatón cruza una calle por un lugar inesperado. En estas situaciones el coche debe informar al conductor pero no abrumarle con datos y posibilidades de actuación.
Antonio Mozas Martínez
Director de ASEPA (Asociación Española de Profesionales de Automoción)
]]>