1. Los conductores son más eficientes 

Con ayuda de navegadores de gps, se automatiza el trabajo relacionado a cómo llegar a cada lugar. Se planifican las rutas de antemano y el operario solo debe ocuparse de conducir, ya no debe realizar llamadas, parar a consultar o anotar indicaciones en papel.

Para garantizar la máxima productividad, a través de estos dispositivos e incluso con los mismos teléfonos móviles, es posible controlar los hábitos al volante; así como los tiempos de entrega; si hubo algún retraso; su ubicación exacta; si se realizaron recorridos no autorizados; si el vehículo se encuentra detenido o en movimiento; la velocidad a la que circula; el lugar y duración de cada parada, etc.

2. Promueve el buen uso de los vehículos

Es posible ahorrar en combustible y reducir el desgaste y mantenimiento de los vehículos gracias a sensores instalados en distintos componentes del vehículo y de donde se obtienen datos como el kilometraje de cada salida, el consumo de combustible, la velocidad máxima a la que se llegó, el estado de neumáticos y la frecuencia de encendido/ apagado del motor.

3. Mayor seguridad en casos de siniestro

Estas tecnologías también ayudan a prevenir y notificar circunstancias como robos, averías o accidentes. Esto evita pérdidas en los activos y, además, garantiza la seguridad del conductor al proporcionarle la tranquilidad de saber que hay alguien vigilando que la ruta se desarrolle con normalidad.

4. Se reducen gastos en todos los sectores

Gracias a la obtención, almacenamiento y análisis que este sistema de información a distancia entrega acerca de la flota, los costos operativos y administrativos se reducen al optimizar la productividad de las operaciones y corregir errores o malos hábitos que afectan la calidad del servicio entregado.

También, de este modo se estarán evitando multas por exceder los límites de velocidad, posibles accidentes, costos de seguro, y el robo de gasolina al detectar intentos de acceso al motor o desvíos no previstos. El dinero que se puede ahorrar en un año al optimizar el consumo de combustible equivale a pagar el sueldo de un conductor, lo cual aumenta los ingresos de la empresa.

5. Facilita los procesos administrativos

Muchos de los inconvenientes con los que deben lidiar los administrativos de empresas de distribución pueden evitarse gracias a los nuevos dispositivos de monitoreo. Estos van recibiendo y registrando la información de los distintos vehículos, generando reportes completos de forma inmediata que permiten controlar el servicio en todo momento y tomar decisiones certeras a futuro.

Gracias a estos sistemas se facilita la comprensión del funcionamiento integral de la flota, se agilizan los procesos de contabilidad y los informes de gastos de la empresa. Para implementar estos sistemas de gestión es necesaria la buena comunicación y disposición de todo el equipo.

6. Aumenta la satisfacción de los clientes 

La información acerca del monitoreo de la flota puede ser traspasada a los clientes y notificarles acerca de sus entregas. Con esto cada cliente puede saber en tiempo real dónde se encuentran sus pedidos y cuál es la distancia que falta recorrer. Con la optimización de la planificación de rutas, pueden estar seguros que recibirán sus activos a tiempo y de forma segura.