Si algo bueno tienen las actualizaciones de software es que permiten añadir nuevas funciones que no tenías cuando compraste el coche. En una de las últimas actualizaciones de Tesla, la firma estadounidense ha incorporado una nueva funcionalidad para que sus coches sean capaces de escanear el asfalto de la carretera y reconocer los baches, ajustando en consecuencia la suspensión. Pero esto no es todo.

En la actualización de software 2022.20, Tesla ha añadido una función que permitirá “leer” el asfalto de la carretera, siendo capaz de reconocer los baches y adaptar la suspensión para superarlos de manera más cómoda. Esta función sólo estará disponible en los modelos que lleven suspensión neumática adaptativa, es decir, en los Tesla Model S y Model X. Los modelos más grandes de la marca.

El conjunto de cámaras y radares que llevan los Tesla ya permite en cierto modo reconocer la carretera para hacer posible la conducción semiautónoma. Ahora se ha dado un paso más allá, con el objetivo de mejorar el confort de los ocupantes, pero también de evitar daños en la suspensión y no sólo eso… Porque el siguiente paso es combinar esta nueva función con el Autopilot.

Para lograr una conducción autónoma completa, el sistema en cuestión debería ser capaz de lidiar con una amplia gama de escenarios diferentes, incluyendo diferentes condiciones climáticas y distintos estados de la vía -no sólo en cuanto al tráfico, también en cuanto al firme-. Elon Musk dijo en 2020 que el Autopilot de Tesla acabaría detectando baches y elaborando mini-mapas para recordarlos y evitarlos, y aunque todavía no se ha llegado a ese punto, este es el primer paso encaminado en esa dirección.

La idea es que los Tesla con suspensión adaptativa puedan anticiparse a los baches de la carretera, adaptar la suspensión para pasarlo de la mejor manera posible, y que en el futuro puedan recordarlos y esquivarlos de manera autónoma -siempre que las condiciones lo permitan-. Lógicamente no se trata de hacer un giro brusco sino una leve corrección en la dirección, sin salirse del carril, como haría cualquier humano atento al firme que no quiere pasar por un bache abrupto.

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Los Tesla Model S y Model X ya reconocen los baches de la carretera (y la idea es que los esquiven)

Escrito por Gonzalo García