La compañía suiza Huber+Suhner ha presentado un nuevo cargador para coches eléctricos que permite recargas ultra rápidas, con un cable refrigerado por líquido que está diseñado para admitir intensidades de hasta 500 amperios en corriente continua, y a temperaturas de hasta 50 grados Celsius. Esto significa que, con un voltaje de 1.000 voltios, se puede conseguir una potencia de carga de hasta 500 kW.

Este nuevo cargador, denominado Radox HPC500, está basado en la familia de cargadores HPC400, que dan un paso más en rendimiento para poder recargar más rápido, a más potencia, y en entornos con temperaturas más altas.

El HPC500 está disponible con la interfaz CCS1 y CCS2, se ha mejorado su protección (ahora es IP67) y puede equipar opcionalmente un sistema incorporado de medición de potencia. Según el fabricante suizo, el cable es un 20% más ligero y más flexible que los HPC400, y cuenta además con conectores reemplazables para aumentar la vida útil del cargador.

Aprovechando todas sus capacidades, con una potencia máxima de 500 kW este cargador podría suministrar en menos de 3 minutos energía suficiente para recorrer 100 km en un coche eléctrico. Según su fabricante, su mayor capacidad de refrigeración le permite trabajar con intensidades de 500 amperios incluso con una temperatura ambiente de hasta 50 grados.

Según Max Göldi, responsable de ventas de Huber+Suhner, es «el primer cargador del mundo» que admite carga en corriente continua con 500 amperios de intensidad. Ante una carga de trabajo como esta, el cargador puede llegar a generar mucho ruido, pero sus creadores aseguran que el nivel sonoro se ha reducido «considerablemente» gracias a una mejora en el funcionamiento de los ventiladores y el intercambiador de calor del puesto de carga.

La compañía suiza suministra actualmente sus cargadores de la familia HPC en Estados Unidos y Canadá para la red Electrify America, y participa también en la implementación de otros proyectos de infraestructura en Europa.